Historia
Historia de las FARC
Historia de las FARC
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Este grupo armado ilegal surgió como consecuencia a la situación del país colombiano en el año 1964, específicamente los operativos que, con el propósito de reafirmar la autoridad del Frente Nacional, el Ejército Colombiano realizó contra la “República de Marquetalia”.
Desde el gobierno de López Pumarejo Colombia afrontó una serie de reformas que facilitaron un proceso de modernización, ahora bien, para la consecución de la modernización el Estado pretendía obligar a los grandes terratenientes a convertir el campo en una gran empresa capitalista cuyo rendimiento pudiera suplir las necesidades de materias primas de la prematura industria y alimentar la población urbana en crecimiento.
Como resultado, los pequeños productores, los campesinos afrontaron una situación económica y social indignante. Este fue uno de los grandes motivos por el cual nació este grupo insurgente revolucionario. Por otro lado, el asesinato del líder liberal Jorge Eliécer Gaitán, el 9 de abril 1948, desencadenó un fuerte enfrentamiento entre los dos únicos grupos políticos de la época; liberal y conservador, que culminó con una amnistía y luego con la creación del Frente Nacional. Realmente, esta situación no dio paso a que otras posturas políticas pudieran incidir en la arena política. Como respuesta se consolidó este grupo armado revolucionario en el año 1964, tal como se ha precitado.
El ambiente era un ambiente de inconformidad, grupos de campesinos liberales exigían al Estado Colombiano una reforma agraria. Muchos de estos campesinos estaban cerca a otros personajes conocedores de posturas comunistas, uno de ellos fue Manuel Marulanda Vélez “Tiro Fijo”. Este hombre se instaló estratégicamente con otros grupos de campesinos, autodenominándose en ese momento Autodefensas Campesinas, en la zona de Marquetalia y otros territorios colindantes en donde la presencia del Estado era nula.
Las Autodefensas Campesinas fueron intervenidas militarmente por el gobierno estatal en 1964, después de este ataque murieron varios miembros, sobreviviendo alrededor de 50 insurgentes. A partir de este momento inició una lucha frontal contra el gobierno y sus políticas, especialmente a contra las políticas agrarias. A partir de entonces, Las FARC toma como bandera la reivindicación de la lucha radical agraria, incorporando posteriormente la línea marxista-leninista. Pero con la caída de la URSS se enrutan hacia el camino del ideal revolucionario bolivariano de corte nacionalista.
En el año 1982, el jefe guerrillero, Tiro Fijo y el gobierno del presidente Belisario Betancur, acordaron una salida a la violencia con el dialogo. Así que implementaron la Comisión de Paz. Es necesario mencionar que esta fue la primera vez que un gobierno opta por negociar con los subversivos. Como muestra de compromiso salieron de la cárcel decenas de presos políticos, la mayoría de los cuales habían perdido su libertad durante el gobierno de Turbay. Además, durante este periodo se había desarrollado el MAS, un movimiento violento que tenía como objetivo eliminar los sectores de izquierda.
Después de varios meses de diálogos, el 30 de agosto de 1984, tres grupos guerrilleros habían pactado el cese al fuego con el gobierno en los Acuerdos de La Uribe. Pero, este proceso empezó a ser desestabilizado con una serie de ataques selectivos a personas inmiscuidas en los acuerdos y también a líderes políticos de estos grupos disidentes. En suma, acontece el histórico suceso de la toma del Palacio de Justicia, que terminó de golpear la política de paz del presidente.
A pesar de ello, continuo el compromiso con la paz, se le dio participación a la Unión Patriótica, un movimiento político de disidentes guerrilleros compuesto por más de 3000 personas, para que participara en la política. Tiempo después, asume el poder Virgilio Barco que sigue con este proyecto. Pero deja de tener forma y en 1986 queda en un estado inconcluso.
Las acciones violentas empezaron a ser cada vez mayores, iniciando la década de los 90 las FARC se pusieron como objetivo arrebatar el poder a las élites colombianas y ostentarlo. Para ello, emprendieron acciones como las tomas de bases militares, ocupación de pueblos y veredas, instalación de carros bomba, enfrentamientos abiertos contra el ejército que generaron una gran ola de desplazamientos forzados de campesinos de diferentes zonas del país, secuestros a militares políticos y civiles tanto colombianos como del exterior, especialmente de la zona de Norteamérica. La idea de estos secuestros era por un lado poner en jaque la tranquilidad del país, pero también obtener beneficios económicos para sustentarse. Pero, muchos de ellos, eran secuestrados para engrosar las filas del cuerpo armado. Como respuesta, el gobierno emprendía políticas radicales de seguridad y también apoyaba discretamente a los grupos paramilitares.
El gobierno de César Gaviria Trujillo inició un nuevo proceso de paz, pero este resultó fallido. Nuevamente las fuerzas revolucionarias entran en un dialogo con el gobierno, en este caso el dirigido por Andrés Pastrana. Los diálogos tuvieron lugar en la región del Caguán, que fue bautizada la “zona de distensión”. Pero mientras se llevaban a cabo los diálogos la realidad del país continuaba igual. El gobierno tampoco ofrecía muchas garantías a los líderes guerrilleros y ellos no pretendían arriesgar su integridad. Por ello, luego de la retención de un avión y el secuestro del congresista Jorge Eduardo Gechen, Pastrana ordenó la retoma de la zona de distensión. En definitiva, los diálogos culminaron sin ningún éxito.
Iniciando el siglo XXI 2000 el gobierno colombiano decidió aumenta los ataques militares contra las FARC para acabar con el grupo armado. Para ello, solicitó apoyo financiero, militar y armamentístico a los Estados Unidos, el apoyo fue legitimado bajo el programa “Plan Colombia” en donde se le destinó a Colombia algo más de 10.000 millones de dólares. Dentro de este monto había cierta cantidad destinada a la lucha contra el narcotráfico, destrucción de los cultivos de coca, y entrenamiento a militares colombianos, entre otros. Sin embargo, las fuerzas revolucionarias de Colombia siguieran funcionando. Aunque, con cierta debilidad.
A partir del gobierno de Álvaro Uribe se hace más fuerte el ataque contra el grupo insurgente, se dieron de baja a varios cabecillas y miembros del Secretariado tales como Raúl Reyes en 2008, y Jorge Briceño “el Mono Jojoy”. En suma, muere por enfermedad el jefe máximo “Tiro Fijo”. Su sucesor fue Alfonso Cano. Una de sus estrategias políticas fue la creación de un nuevo impuesto sobre el patrimonio para financiar los efectivos del ejército y la policía. Durante su mandato no hubo tendencia al dialogo sino más bien a la política de seguridad social.
Con la llegada de Juan Manuel Santos a la presidencia se inició un nuevo proceso de negociación de un acuerdo de paz, desarrollado en la Habana, Cuba con el apoyo de Cuba y Noruega principalmente. Luego de varios meses, se firmó el Acuerdo definitivo de Paz con Las FARC, representadas por Timochenko, el 26 de septiembre del 2016. Esto le permitirá al grupo armado revolucionario ilegal tener participación en la rama legislativa del país. El proceso de paz fue un hecho histórico porque primero que todo logró la consecución de tan buscado acuerdo de paz. La paz será lograda lentamente por medio del acatamiento de seis puntos presentes en el Acuerdo de Paz. Lo destacable de este proceso fue que trató de integrar a la población afectada por la guerra y también a la población civil que no sufrió los flagelos de la guerra directamente. Sus opiniones y anhelos fueron escuchados en varios actos políticos y también se hizo uso de un plebiscito por la paz celebrado el 2 de octubre del 2016.