Militar
Manuel Azaña
Biografía de Manuel Azaña
Manuel Azaña (10 de enero de 1880 – 3 de noviembre de 1940) político y presidente de la Segunda República. Nació en Alcalá de Henares, Madrid, España. Provenía de una familia de postura política liberal. Azaña se mudó a Madrid para estudiar derecho, se doctoró con una tesis sobre La responsabilidad de las multitudes. Completó su formación gracias a una beca de la Junta para Ampliación de Estudios en París en 1911. Ocupó un cargo en la secretaría del Ateneo de Madrid hasta el año de 1920; su interés por los asuntos militares se inició al ser comisionado por el Ateneo para visitar los frentes de la Primera Guerra Mundial en Francia e Italia (1916).
En 1913 ingresó en el Partido Reformista de Melquiades Álvarez y junto a José Ortega y Gasset abrieron la Liga de Educación Política; años después fundó la Unión Democrática Española; pero no logró ser elegido diputado en las Cortes de la Restauración. Se apartó temporalmente de la política para dedicarse al periodismo, primero como corresponsal en París, luego al frente de La Pluma y finalmente como director de la revista España.
Bajo la dictadura de Miguel Primo de Rivera tuvo que abandonar el Partido Reformista y se declaró partidario de la República. En el año de 1925 fundó Acción Republicana; al mismo tiempo crecía su prestigio intelectual, con la publicación de obras como El jardín de los frailes o los Ensayos sobre Valera, dedicados al novelista español Juan Valera. En 1930 como figura de alcance nacional se le propuso ser presidente del Ateneo. Este político español participó en el Pacto de San Sebastián que tenía como objetivo derrocar la monarquía de Alfonso XIII.
Con la proclamación de la República española, que tuvo lugar el 14 de abril de 1931, Manuel Azaña se integró en el gobierno provisional como ministro de la Guerra. Participó activamente en las Cortes constituyentes, y asumió la presidencia del Consejo de Ministros luego que Niceto Alcalá Zamora abandonara el gabinete por discrepancias sobre las relaciones Iglesia-Estado. Impulsó un amplio programa de reformas: secularizó la vida pública (legalizando el matrimonio civil y el divorcio), reformó el ejército, adelantó una reforma agraria y concedió la autonomía a Cataluña. Todo ello le enfrentó con las fuerzas conservadoras. El apoyo del movimiento obrero no fue tan fuerte como se esperaba, en un momento en que la depresión económica mundial agudizaba las dificultades. Desprestigiado por la represión armada de un levantamiento campesino en Casas Viejas, renunció y perdió las elecciones de 1933, que aseguraron la victoria de la derecha.
En 1934 realizó una alianza política con Marcelino Domingo, formando Izquierda Republicana, partido con el cual realizó una efectiva campaña de oposición al gobierno. La ascensión de José María Gil Robles al poder, interpretada como el triunfo del fascismo en España, le llevó a ser parte de la Revolución de Octubre de 1934 y se integró al Frente Popular con todas las fuerzas de izquierdas.
Presidente de la República
El triunfo en las elecciones de febrero de 1936 le aseguró la jefatura del gobierno y le promovió después a la Presidencia de la República. No dudó en retomar el programa reformista del primer bienio republicano, pero el inicio de la Guerra Civil española fue un obstáculo para su desarrollo. Luego, esto afectó su gobierno, el presidente empezó a perder la capacidad para mantener la unidad y el orden en el bando republicano, ante el radicalismo y los conflictos internos de las organizaciones obreras; las fuerzas golpistas. Refugiado en su papel de intelectual, se permitió reflexionar sobre la guerra en La velada en Benicarló (1937). Perdida la guerra, se exilió en Francia y renunció a la presidencia en el año de 1939. Su vida terminó el 3 de noviembre de 1940.