Arte
Gerhard Marcks
Biografía de Gerhard Marcks
Gerhard Marcks (18 de febrero de 1889 – 13 de noviembre de 1981) escultor y pintor del movimiento del expresionismo. Nació en Berlín, Alemania. Desde el año de 1907 empezó a realizar sus primeros trabajos en el campo de la escultura. Conoció a George Kolbe, Richard Scheibe y Gaul. En 1908 abrió un taller con Scheibe. Sus primeras obras tienen la influencia de la tradición gótica germana: figuras esbeltas y estilizadas y una mayor inclinación por las formas medievalizantes, en detrimento de las expresionistas.
Para el año de 1914, ambos realizaron unos relieves para la exposición del Deuscher Werkbund (Colonia), la exposición estaba a cargo de Walter Gropius. Además, presentaron varios relieves realizados en terracota que luego fueron dispuestos para la decoración del restaurante de Gropius y Meyer. Este evento fue el umbral de una fructífera colaboración con Gropius, responsable de la fundación de la Bauhaus.
Con el comienzo de la Primera Guerra Mundial, Marcks tomó la decisión de luchar por su país. En el periodo de posguerra activó la colaboración con la Bauhaus, esta agrupaba a varios artistas que hacían parte de la Escuela de Bellas Artes y la de Artes y Oficios, la Bauhaus ocupó un papel primordial en el panorama cultural alemán. Su programa estaba hondamente mediado por las experiencias de Otto Bartning, y pretendió concertar la independencia de la obra artística y su carácter funcional.
Esta perspectiva sociológica de la función de la obra de arte será característica de la producción de la Bauhaus, hasta 1933, año de su clausura. Marcks fue uno de los primeros artistas que fueron invitados a ser parte de este selecto grupo de artistas. Su labor fue encargarse de la dirección del taller de cerámica. La Bauhaus tuvo varios talleres, todos con una perspectiva vanguardista y funcional. Cuando la Bauhaus estaba consolidada tenía talleres de imprenta, mueble, textil, tipografía, metal, plástica y pintura mural.
Su taller de cerámica tenía gran independencia y ello se reflejó en una producción de mayor cantidad y calidad. Un aporte importante en su taller se lo dio Max Krehan, gracias a su talento, pero también a la dotación de hornos y de otros materiales utilizados en el taller. En definitiva, le brindó un notable avance en la producción de este taller. En este taller se inculcaba, a los estudiantes, la pasión por la investigación de las formas tradicionales folklóricas, para luego adaptarlo a una perspectiva propia.
Marcks fue el pionero en el concepto de diseño industrial en la escuela de Weimar. Posteriormente, por problemas internos Marcks decidió dejar la dirección del taller y centrarse en el aspecto productivo con ayuda de sus estudiantes: Otto Linding y Theodor Bogler. Cuando ascendió el nazismo, el escultor fue destituido. Sus obras fueron confiscadas y su difusión prohibida. Con la caída de Adolf Hitler, su suerte empezó a mejorar y fue llamado a la Escuela de Arte de Hamburgo. Realizó varias exposiciones individuales y colectivas y estuvo al mando de diseños de monumentos e iglesias. Por ejemplo: el tímpano de la iglesia de Santa Catarina de Lübek.
Durante su trayectoria practicó tanto la escultura de bulto redondo como el relieve en terracota e incluso el grabado. Sus obras tuvieron la influencia de Kolbe y Scheibe, y la de Wilhelm Lehmbruck, representante de una generación impregnada por el impresionismo y el clasicismo. Una obra significativa de esta etapa es su escultura Madre turingia (1921), escultura en acero, también podemos mencionar: Pareja de enamorados. Su técnica más usual fue la xilografía, una obra realizada con esta técnica es Gato y caballo (1921). Posteriormente se destaca Freya, escultura realizada en el año de 1949, donde demuestra su predilección por un sentido clásico de la figura que le emparenta con Kolbe y en la que queda patente la influencia del escultor clasicista Adolf Hildebrand (1847-1921). Luego de su muerte le rindieron varios homenajes, uno de ellos a cargo de la comunidad alemana residente en Chile, construyeron la estatua Gisela, que se encuentra en el cerro Santa Lucía de Santiago; su inscripción reza: “Tributo de gratitud del pueblo alemán”.