Lao Tse (VI – IV a. C.), también llamado Lao Zi, Lao Tzu o Laocio, fue un pensador chino, creador del taoísmo. Su nacimiento se dio en una pequeña aldea de la actual provincia de Honan, situada en la región más meridional de China. Su nombre de nacimiento era Erl Li. Luego se le designo un nombre de erudito: Lao Tse, que significa anciano maestro. Fue contemporáneo de Buda, Zoroastro, Mahavira, Pitágoras y varios de los filósofos presocráticos.
Se desempeñó como alto funcionario en la corte de Tchou y a su vez como bibliotecario en la misma corte. Dicha labor es bien diferente a lo que hoy conocemos, así que, tenía encomendado un cargo sacerdotal y su misión consistía en consultar los archivos, los oráculos y textos sagrados. A raíz de ello, comenzó a indagar el sentido de la existencia humana, del éxito y la decadencia. A partir de esta indagación se convirtió en un sabio de la época.
Abandonó China para trasladarse hacia el Tíbet y al cruzar la frontera, el aduanero Yen-Hi reconoció al sabio y le pidió que le hablara sobre la verdad y la sabiduría. De este dialogo que tomó un año, surgió un regalo para el aduanero: un precioso libro llamado Tao-Te-King, El camino de la razón y de la virtud, que contiene escasas 5.000 palabras, solo fueron necesarias estas palabras para enseñar al hombre todo lo que ha de saber para ser feliz eternamente. Una vez entregado el libro, Lao-Tse se despidió con gratitud del hombre y de su familia que lo acogieron en su hogar. Continuó su camino sin saber la dirección que tomaría.
El Tao Te-King es la obra literaria más traducida del chino y ha tenido una enorme influencia en el pensamiento y la cultura oriental. El libro es una antología que recoge antiguas enseñanzas, además de ello, fue la primera vez que Lao Tse consigna sus pensamientos en un papel, todas sus enseñanzas eran difundidas por vía oral.
“La persona sabia no ambiciona el poder y evita la opulencia, el lujo y la prodigalidad”. Lao Tse
En este breve tratado, Lao Tse planteó una moral individual fundada en perseguir el camino de la naturaleza, para la filosofía china se conoce como el Tao; en consecuencia, pidió virtudes como la sencillez y la naturalidad, reprobó la codicia de poder y de riqueza y proscribió el ejercicio de la violencia. El pensamiento de Lao Tse, contenía además una tendencia política liberal y pacifista, recomendando a las autoridades intervenir solo cuando fuere necesario en la vida de los pueblos y no agobiarles con impuestos y regulaciones drásticas. En el Tao Te-King se describe que para ser un hombre perfecto, santo y sabio, el hombre debe tener una conducta humilde, modesta y sin ambición; debe guiarse por la regla de no actuar, no intervenir, dejar a las cosas seguir su curso natural porque la naturaleza es perfecta. A partir de este escrito arrancaría con el paso del tiempo la filosofía taoísta.
Lao Tse tiene un encuentro con Confucio alrededor del año 521 a.C. Confucio tenía alrededor de treinta y cuatro años, y Lao Tse unos cincuenta. Este encuentro concluyó en bastantes discordancias porque los pensamientos de los dos eran totalmente distantes. Lao Tse no se preocupó por inmiscuirse en temas políticos a diferencia de Confucio, que buscaba la formación de sabios y hombres perfectos propuestos a ocupar un puesto de ministro o de consejero cerca del soberano. En contraposición el ideal humano para Lao Tse era la no intervención.
Este diálogo fue legendario y sirvió como espejo para reflejar la rivalidad que existió entre las dos escuelas en China; el confucianismo, orientado a la consecución de la mejora y transformación del mundo, a través del fortalecimiento del aparato estatal y las formas de gobierno, y el Tao, escuela de Lao Tse, más dirigido a la esencial del mundo y a buscar la salvación fuera de la experiencia ordinaria en el mundo.
La influencia de este pensador chino fue muy profunda, después de su muerte. Su filosofía, aunque no contenía un carácter religioso se transformó en una religión denominada el taoísmo, posteriormente esta recibió influjos de otras tendencias, dando lugar al principio a una mística contemplativa basada en la inacción, aborda el flujo natural del universo o la fuerza detrás del orden natural que mantiene todo en equilibrio y en perfecto estado. Su primer maestro fue un sumo sacerdote llamado Maestro del Cielo.
“Las palabras precisas no son necesariamente elegantes. Las palabras bonitas no siempre son dignas de confianza”. Lao Tse
La influencia del Tao la podemos observar en la rebelión popular de los «Turbantes Amarillos», que tuvo lugar en China oriental en el siglo II y llegó a desestabilizar al poder imperial. Los líderes de la rebelión fueron los hermanos Zhang Jue, Zhang Bao y Zhang Liang, nativos de la provincia de Hebei, pero que se trasladaron a Shandong, donde practicaban como curanderos. Los tres eran seguidores del taoísmo, atendían a menudo de forma gratuita a pacientes que no podían pagar sus servicios. No tardaron en fundar una secta taoísta que rendía culto a una divinidad llamada Huang-Lao y que amparaba, entre otros, los principios de igualdad de derechos para todas las personas y de una redistribución equitativa de la propiedad de la tierra. A largo plazo, la influencia más pura del pensamiento de Lao Tse, empezó a combinarse con otras corrientes filosóficas o religiosas de Asia, como el confucionismo y el budismo
Vemos pues que la existencia de Lao Tse fue tan importante para el pensamiento oriental que lo convirtieron en una deidad principal de la religión taoísta que afirman revelaba los textos sagrados a la humanidad. Sobre la muerte de este pensador chino no se tiene conocimiento, se dice que vivió 200 años.