Historia
Mahatma Gandhi
Biografía de Mahatma Gandhi
Mohandas Karamchand Gandhi, también conocido como Mahatma Gandhi, fue un pensador, abogado y político hinduista, nacido el 2 de octubre de 1869 en Porbandar, India. Fue llamado en contra de su voluntad por el poeta Rabindranath Tagore, “Mahatma”, que significa Grande Alma. Gandhi consiguió la libertad de la India sin usar violencia; su nombre quedó asociado eternamente a la doctrina de la resistencia pacífica.
Gandhi tuvo una gran influencia cuando era pequeño, pues aprendió desde muy pequeño a ayunar para purificarse, a no hacerle daño a ningún ser con vida, a tolerar otras creencias religiosas, a ser vegetariano. Era el menor de los tres hijos de la unión entre Karamchand Gandhi y Putlibai.
Gandhi fue un joven retraído, silencioso y nada brillante en los estudios. A la edad de trece años, sus padres siguiendo la costumbre hindú, lo casaron con una niña de su edad llamada Kasturbai, con quien desde los seis años ya estaba comprometido sin tener ni idea.
En 1884 falleció su padre, Karamchand Gandhi. Su madre muere seis años después.
Como las calificaciones de Gandhi no mejoraban, su familia decidió en el año de 1888 enviarlo a Londres para que se licenciara en Derecho; tenía diecinueve años y acababa de ser padre por primera vez. Y en la capital inglesa comenzó a frecuentar a los teósofos, quienes lo iniciaron en la lectura del primer clásico indio, el Bahagavad Gita -que forma parte del Mahabharata, el libro sagrado de los hindúes- al que llegaría a considerar “el libro por excelencia para el conocimiento de la verdad”. Ahí también empezó a saber sobre Cristo, y durante un tiempo se sintió fascinado por la creencia cristiana y hasta dudaba entre el hinduismo y ésta. “El Sermón de la Montaña” de Jesús inspiró sus ideales de la no violencia.
En 1893 Gandhi navegó hacia Sudáfrica a trabajar. Gandhi siempre contaba que la experiencia más decisiva de su vida, la que lo llevó a ser un líder político de primera magnitud y un defensor tenaz de la igualdad y la fraternidad humanas, fue mientras viajaba en un tren de Durban a Pretoria, en Sudáfrica. En la mitad del recorrido, un hombre blanco entró en su posada y le ordenó que se fuera al vagón de equipajes, que ese era el lugar reservado para los “Negros”. Gandhi, quien tenía billete de primera, se negó. El hombre llamó a la policía y Gandhi fue expulsado del tren en plena noche. Desde entonces Mahatma Gandhi decidió luchar contra cualquier forma de colonialismo y racismo con las armas de la no violencia.
Finalizado su trabajo, Gandhi estaba a punto de volver a la India cuando se enteró de la existencia de un proyecto de ley para retirar el derecho de sufragio a los hindúes, entonces decidió retrasar la partida un mes para organizar la resistencia de sus compatriotas, y ese mes se convirtieron en veintidós años, y ahí puso en práctica su doctrina del Satyagraha (El credo de la no violencia). El Satyagraha se puliría tiempo después hasta lograr la fuerza política que demostró en la lucha por la independencia de India.
Si Gandhi ingresó en la política fue porque creía que la religión era el cimiento de todo y quería emplear sus principios morales a todos los aspectos de la vida. De ahí que fuera tan extremo en la defensa de la no violencia, como muestra su frase:
“Mi servicio nacional es parte de mi entrenamiento para liberar mi alma de la esclavitud del cuerpo”. Mahatma Gandhi
Su forma de pensar debió ser influenciada por el contexto familiar y social en el que creció y se desarrolló, y por el carácter tímido que tuvo en la infancia. Pese a sus fracasos, Gandhi se convirtió en uno de los personajes de mayor relieve histórico del siglo XX. Su ejemplo inspiró a varios luchadores por las libertades tan reconocidos como Nelson Mandela y Martin Luther King; la mayoría de sus ideas y prácticas siguen siendo analizadas y utilizadas en todo el mundo por grupos ecologistas y organizaciones antiglobalización.
En el año de 1906 hizo su voto de abstinencia sexual. En ese mismo año inició la resistencia pasiva y estuvo cuatro meses en la cárcel. En el año de 1913 obtuvo otros nueve meses de cárcel por la épica marcha de Natal (Sudáfrica). Gandhi al abandonar Sudáfrica se llevó la admiración de políticos que le habían batallado fuertemente. Y aún hoy en día, gracias al legado de Gandhi, los indios sudafricanos gozan de privilegios que la población negra no ha podido conseguir.
El regreso de Mahatma Gandhi a la India en el año 1915 concuerda con el estallido de la primera Guerra Mundial. Fue entonces cuando Europa experimentaba la cúspide de la violencia política de Hitler y Mussolini, cuando Gandhi sembró en sus campañas de desobediencia civil uno de los mayores éxitos políticos del siglo XX: la independencia pacífica de la India. Recurre una vez más a su fina psicología, a su amplio conocimiento de la mentalidad británica: en nombre del Fair Play renuncia a combatir contra los ingleses mientras dure la guerra. A la vez que anuncia su intención de no combatir contra Inglaterra, crea en la ciudad de Ahmedabad una granja, una institución aparentemente casi monástica donde congrega a sus discípulos. Allá donde surgen esas pacíficas comunidades de místicos vegetarianos, aparece más tarde bajo la dirección de Gandhi, una gigantesca revolución. Desde la guerra de Secesión americana, Inglaterra queda sin algodón e India se convierte en el primer exportador de este producto. La India exporta el algodón en bruto y Gran Bretaña lo convierte en tejidos dando así trabajo a la población obrera inglesa. Cuando un indio compra vestidos occidentales, está pagando el precio de oro el algodón que él mismo cultiva. Por eso Gandhi lucha contra la industria textil británica; por eso pide la vuelta del hilado artesano, por eso prohíbe el uso de vestidos occidentales. Por eso crea la granja en Ahmedabad, ese monacato que es el polvorín de una gran revolución.
El fin de la primera Guerra Mundial trajo un cambio esencial en la política de colonias británicas. Si en la campaña de Bihar se habían escuchado todas las propuestas de Gandhi a favor de los campesinos, el paisaje cambió para 1919. Muchos indios fueron encarcelados, y en la provincia de Penjab se organizó un fuerte movimiento terrorista. A partir de ese año Gandhi incrementa su campaña política, mostrando decididamente su propósito de conseguir la independencia.
Años después de la masacre, Gandhi se convirtió en el líder nacionalista indiscutido, logrando la presidencia del Congreso Nacional Indio. Se colocaron en marcha las grandes campañas de desobediencia civil. Miles de indios llenaron las cárceles y el mismo Gandhi fue detenido en marzo de 1922. Diez días después inicia “el Gran Juicio”; el juez británico “Lamenta de corazón” tener que sentenciarlo a seis años de prisión. Gandhi por su parte, acepta “Como un honor” la sentencia. Cuando enferma en la cárcel en 1923, toda la prensa europea saca una campaña a su favor, y el virrey meses después decide dejarlo libre.
La “Marcha de la sal” fue la primera gran batalla de Gandhi por la independencia. El 12 de marzo de 1930, en la que, junto a 78 fieles, salió de Sabarmati y recorriendo a pie 390 km duran 24 días, seguido por un número creciente de admiradores. Llegó al mar y agarró un puñado de sal, acto simbólico con el que invitaba a la población a oponerse al monopolio británico de la sal. Se inicia así la campaña de desobediencia civil.
Y desde la prisión de Yervada, donde había sido desterrado nuevamente, realizó en 1932 un “ayuno hasta la muerte”.
El estallido de la Segunda Guerra Mundial en el año 1939-1945. Gran Bretaña presionada y agotada por los Estados Unidos, confió en febrero de 1947 al primo del rey Jorge VI y biznieto de la reina Victoria, Lord Mountbatten, la negociación de la independencia de India con Jinnah (jefe de la liga musulmana) y Gandhi. En tan sólo siete meses India recuperó la libertad perdida tres siglos atrás.
Mahatma Gandhi tuvo varios atentados de fanáticos extremistas hindúes y musulmanes. Durante sus últimos días en Delhi hizo un ayuno para reconciliar a las dos comunidades, el cual resultó afectando su salud. Aun así, salió de nuevo en público unos días antes de su muerte.
El 30 de enero de 1948, a sus 79 años, cuando Gandhi se dirigía a la muchedumbre en Nueva Delhi, el extremista hindú Nathuram V. Godse se acercó y aprovechando la confusión le hizo tres disparos. Gandhi murmuró “Hei, Rama” (Oh, Dios) y murió.
LAS NUEVE PAUTAS DEL SATYAGRAHA
- Un Satyagrahi, es decir, un resistente civil, no sentirá rabia.
- Sufrirá la rabia de su oponente.
- Haciéndolo, soportará los asaltos de su oponente, nunca retrocederá; pero no se someterá, por miedo al castigo o algo parecido, a ninguna orden expresada con rabia.
- Cuando cualquier persona con autoridad intente arrestar a un resistente civil, él se prestará voluntariamente al arresto, y no se resistirá a la sustracción de sus propiedades cuando las autoridades quieran confiscárselas.
- Si un resistente civil tiene alguna propiedad en su posesión como fideicomisario, rehusará entregarla, aunque al defenderla pueda perder su vida. En ningún caso tomará represalias.
- No tomar represalias incluye insultar y maldecir.
- Por tanto, un resistente civil nunca insultará a su oponente, y por tanto no tomará parte en ninguno de los insultos de nuevo cuño que son contrarios al espíritu de Ahimsa.
- Un resistente civil no saludará la bandera de Reino Unido, ni la insultará, a ella o a los oficiales, ingleses o indios.
- En el curso de la lucha, si alguien insulta o asalta a un oficial, el resistente civil deberá proteger a dicho oficial u oficiales del insulto o del ataque incluso con su vida.
“Sólo soy una pobre alma extraviada que se esfuerza en ser totalmente buena”. Mahatma Gandhi