Pierre-Simon Laplace (1749 – 1827) matemático francés. Nació en la localidad de Beaumont-en-Auge, Francia. Su familia no era adinerada, su padre se desempeñó como granjero y productor de sidra; al igual que su madre. Laplace estudió en la escuela de la localidad, una escuela de poco prestigio. Pero, su inteligencia era extraordinaria. Su padre realmente tenía el sueño de que su hijo fuera sacerdote. Pero, Laplace sabía que su pasión era los números. Gracias a la intervención de D’Alembert, quien quedó realmente impresionado por un escrito del joven sobre los principios de la mecánica, al terminar la escuela le solventó para que se dirigiera a la capital para estudiar, así, consiguió una plaza en la École Militaire.
Durante su estudio universitario, se enfocó en el estudio, entre 1771 y 1789, de la astronomía, particularmente ejecutó un estudio sobre las desigualdades planetarias, también como parte complementaria realizó algunos análisis, que quedaron consignados en escritos sobre cálculo integral y ecuaciones diferenciales en derivadas parciales. Posteriormente, ingresó en la Academia de las Ciencias de París en 1773 y años después se desempeñó como catedrático en el Cuerpo Real de Artillería. Su forma de ser, crítica y algo beligerante sobre la situación del país, hizo que tuviera pocos colegas y fuera fuertemente cuestionado.
Laplace fue un hombre muy inquieto, se mantenía en constante movimiento y siempre buscaba hallar y responder preguntas. Podemos destacar el detallado estudio sobre la determinación de la atracción de un esferoide sobre una partícula situada en su exterior, para esto utilizó el análisis de armónicos de Laplace y el concepto de potencial. Fue un matemático, que a diferencia de muchos se preocupó por publicar sus resultados, tal vez pensando en la posteridad. Siguiendo la linea, en 1796 publicó su Exposición del sistema del mundo, en este ofreció al publicó un análisis de las leyes de Newton y una exposición del sistema solar.
Otro texto importante fue el Tratado de mecánica celeste (1799-1825), que alcanzó los cinco tomos. En los dos primeros volúmenes se dedicó a describir métodos para el cálculo del movimiento de los planetas y sus satélites, y desde ahí pudo determinar sus trayectorias. Los siguientes tomos contienen la aplicación de estos métodos y muchas tablas astronómicas.
Casi al mismo tiempo, Laplace estuvo trabajando en un ensayo sobre probabilidades, lo interesante de este ensayo es que el matemático lo dirigió a las personas con poco conocimiento matemático con el fin de que el conocimiento llegara a más personas. Por otro lado, este fue la base para la realización de su Teoría analítica de las probabilidades, donde incluyó una exposición del método de los mínimos cuadrados, base de toda la teoría de los errores. En el momento en que realizó estos análisis se desempeñaba como profesor de matemáticas de su universidad.
Laplace tuvo un gran logro, ser elegido miembro en 1785 de la Academia Francesa de Ciencias, estuvo allí por varios años. Hasta que tuvo que abandonar su país debido a los estragos del Régimen del Terror, en 1793. Laplace participó en la producción del nuevo calendario de la Revolución. Al retornar, con el ambiente más estable, fue profesor de la Escuela Normal y también fue director del Observatorio de París. Simultáneamente, continuaba investigando sobre probabilidad, mecánica celeste y física.
Por su activismo político, Laplace asumió el cargo de Canciller del Senado y recibió la Legión de Honor, durante el periodo de Napoleón. Más tarde Napoleón le nombró Ministro del Interior cargo en el que duro un periodo de tiempo considerable. Pero en el momento en que se restauró la monarquía Borbónica y fiel a sus principios de seguir la política del momento, decidió oponerse a Napoleón, siendo nombrado Marqués en 1817.
Su vida personal fue muy discreta, Laplace se casó con la joven Marie-Charlotte de Courty de Romanges, de su unión nacieron dos hijos. Charles-Emile, que se inclinó por la milicia y Sophie-Suzanne que no pudo alcanzar sus sueños de ser mamá ya que murió mientras daba a luz a su primer hijo. Sus aportes fueron inagotables, realmente este hombre creó conocimiento y presentó varios textos hasta la avanzada edad de 70 años. En los últimos siete años de su vida, murió a los 77 años en el año de 1827. Se dedicó a su familia.
Los principales aportes de Laplace se perciben en las matemáticas, en la astronomía; demostró la estabilidad del sistema solar, describió el movimiento de los centros de gravedad de los cuerpos del sistema solar
Por otro lado, creó la conocida ecuación de Laplace, estudiando la atracción gravitatoria de un esferoide sobre un objeto externo. También encontró varios métodos como la resolución de ecuaciones, de desarrollo de determinantes y de aproximación de integrales definidas, por último introdujo el uso de la función potencial, así como las funciones llamadas armónicos esféricos. En otros campos también su aporte es innegable como el de la física y la química.