Biografía de Gustave Flaubert

Gustave Flaubert (12 de diciembre de 1821 – 8 de mayo de 1880) escritor. Nació en localidad francesa de Ruán, Francia. Su padre se desempeñó como  médico, y siempre estuvo muy pendiente de su hijo al cual le proporcionó una buena educación. Aunque él quería que su hijo fuera médico también. Pero desde muy joven Gustave mostró su pasión por la literatura. En su juventud fue colaborador de la revista literaria Colibrí, a partir de ese momento se puede percibir de manera un poco difusa los temas que desarrollaría el escritor en su etapa madura. Y luego fundó periódico manuscrito Art de Progrès.

Gustave se dirigió a París para estudiar derecho, pero su delicado estado de salud le obligó a abandonarlos. Sufrió sus primeras crisis epilépticas en los años 1843. Estas crisis influyeron de forma evidente en la conducta social del escritor. Conoció a Víctor Hugo y a la poetisa Louise Colet, su musa y amante. Cuando ella falleció, en 1876, se sumió en una depresión que agudizo los episodios de epilepsia. También en Paris conoció a a Maxime du Camp, con quien construyó una amistad para toda la vida, y junto al que realizó un viaje aventurero por las regiones de Turena, Bretaña y Normandía.

Tuvo que participar como teniente de la guardia nacional en la guerra franco-prusiana, al terminar la guerra se mudó a una finca familiar en Croisset, donde vivió con su madre y su pequeña sobrina y se dedicó completamente a la literatura. Por ese momento, vivió de rentar unas propiedades heredadas. Posteriormente, entre 1849-1851, realizó con Maxime otro viaje a Egipto, Asia Menor, Turquía, Grecia e Italia, cuyos recuerdos fueron fundamentales para la creación de su novela Salambó. Cuando Gustave no se encontraba viajando permanecía por largos meses internado en su casa en Croisset, entregado a su labor de escritor.

“Cuidado con la tristeza, es un vicio”. Gustave Flaubert

Para Flaubert los viajes tenían un gran valor porque estos eran considerados por él como su fuente de inspiración, a través de estos podía conocer la realidad de cada cultura y de sus habitantes. Flaubert en pocas ocasiones dio cabida a la pura imaginación, por el contrario, trabajaba con empeño y precisión el estilo de su prosa, desterrando cualquier lirismo, en sus obras no deseaba nada que no fuera real; ahora bien, esa realidad debía tener la belleza de la irrealidad.

Su forma de ser estricta tanto en la vida diaria como en su labor como escritor se dejó ver cuando antes de publicar La tentación de San Antonio tuvo que reescribirla tres veces, en las que nada se enunciaba sin estar previamente controlado. Las hondas investigaciones eruditas que desarrolló para escribir su novela Salambó, tuvieron que ser completadas con otro viaje al norte de África. Una de sus grandes e importantes obras es Madame Bovary (1856), cuya protagonista, una mujer mal casada que es víctima de sus propios sueños románticos, representa esta obra toda la frustración que, según Flaubert, había producido el siglo XIX, siglo que él catalogo como mezquino y estúpido todo esto causado por la burguesía.

Sin duda la publicación de Madame Bovary, le supuso una rápida consagración literaria, le creó también serios problemas. Recibió fuertes críticas provenientes de los moralistas, que condenaban el trato que daba al tema del adulterio, fue incluso sometido a juicio por inmoralidad. Pero esto no paró su inspiración literaria y de ahí nació Salambó, un proyecto fantasioso y barroco, que relataba el amor imposible entre una princesa y un mercenario bárbaro en la antigua Cartago. Luego, publicó otra importante obra: La educación sentimental (1869), en ella describió las esperanzas y decepciones de la generación de la revolución de 1848.

Flaubert logró demostrar a través de sus obras todo tipo de temas sociales y morales, por ejemplo en su última gran obra, Bouvard y Pécuchet, que no pudo ser concluida a causa de su fallecimiento, presentó una sátira sobre el ideal de conocimiento de la Ilustración.  El estilo que manejo Flaubert fue muy importante porque sirvió como referente para otros artistas y jugó un papel central en la evolución del género novelístico hasta la mitad del siglo XX. Por ejemplo el tema del adulterio se convirtió en recurrente dentro del realismo, y fue abordado desde diferentes perspectivas por figuras de la talla de León Tolstói o Leopoldo Alas «Clarín».

En la mayoría de las obras de Flaubert se encuentra mezclado los elementos románticos y naturalistas, por ejemplo en novelas como La Tentación de San Antonio (1874) que resultó ser un éxito y recibió excelentes comentarios por parte de la crítica, quienes llegaron a compararla, por su importancia, con el Fausto de Goethe.

Siempre se destacó la gran precisión en los detalles y en el lenguaje de Flaubert. Por un tiempo el escritor tuvo que pasar difíciles situaciones económicas hasta que fue beneficiado con una pensión oficial de mil francos en reconocimiento a su gran labor literaria. Gustave Flaubert murió en Croisset, Baja Normandía, Francia, el 8 de mayo de 1880. A su funeral acudieron lo más distinguidos literatos del momento y le rindieron un importante homenaje.