Artistas

Ómar Rayo Reyes

BIOGRAFÍA DE ÓMAR RAYO REYES

Ómar Rayo Reyes es un reconocido pintor, grabador y escultor colombiano, autodidacta. Nació en el Municipio de Roldanillo, Valle del Cauca, Colombia, el 20 de enero 1928, hijo primogénito de Vicente Rayo y María Luisa Reyes, cursó por correspondencia sus primeros estudios de dibujo en una Academia de Buenos Aires, en 1947 se radicó en la ciudad de Santiago de Cali; no pudo conseguir empleo como ilustrador en ningún periódico local, por lo que sobrevivió trazando caricaturas, pasando brevemente por la Escuela de Bellas Artes.

Inició su carrera artística como caricaturista dibujando e ilustrando para los periódicos y Revistas de las ciudades de Cali y Bogotá. Cuando se trasladó a Bogotá trabajó como ilustrador en varias publicaciones capitalinas. El periódico el Siglo lo contrató como dibujante caricaturista de los participantes en la IX Conferencia Panamericana. Durante su permanencia en Bogotá frecuentó el café Automático, en el que se relacionó con Intelectuales y Literatos como León de Greiff, Luis Vidales y Jorge Zalameo.

Entre los años de 1948 y 1953 efectuó diversas exposiciones de sus obras en diferentes ciudades de Colombia, alcanzando renombre en el mundo artístico.

En este mismo año (1953) tuvo la oportunidad de ampliar estudios en Madrid (España) mediante una beca, pero prefirió hacer un recorrido por Latinoamérica, hizo algunas exposiciones. Convivió durante algún tiempo con los indígenas de la Amazonia y estudió el arte incaico y mesoamericano razón por la cual se interesó por agregar a sus obras la geometría, que lo posicionó como artista autentico.

En 1954 viajó a Perú, Ecuador, Bolivia, Chile, Argentina, Uruguay y Brasil; en 1958 regresó a Colombia e hizo exposiciones en Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla. Gracias a una beca estuvo un año en México (1959 a 1960) en el taller La Esmeralda, donde conoció a José Luis Cuevas, Francisco Toledo y Juan Rulfo. Después se trasladó a New York, permaneció aproximadamente diez años, allí su obra alcanzó pleno reconocimiento Internacional, en esta época se ocupó especialmente a la realización de grabados en relieve mediante la técnica de la talla dulce, en los que trató todo tipo de temas, inventando series de animales, objetos cotidianos, o figuras humanas. En 1970 mereció un premio especial en la Primera Bienal de Grabado Latinoamericano, en San Juan de Puerto Rico y ese mismo año logró el primer puesto del Salón Nacional de Artistas de Colombia. En 1971, El Museo de Arte Moderno de Bogotá organizó una exposición retrospectiva de su obra.

En 1981, se inauguró en Roldanillo (V) el Museo Rayo de Dibujos y Grabado Latinoamericano. Diseñado por el Arquitecto y amigo Mexicano Leopoldo Gout, se exhibieron dos mil cuadros y grabados de la creación de Rayo, además de quinientos artistas diferentes de Latinoamérica que hacen parte de su colección personal. También funcionan allí diferentes módulos como el de las exposiciones permanentes y las itinerantes. Hay una biblioteca, el taller de artes gráficas y un teatro con capacidad para 150 personas.

La obra de Ómar Rayo tiene su estilo original, dedicado a las figuras geométricas con imágenes claras, pintó objetos específicos, él era un artista geométrico, óptico, que amaba los cuadros, los rectángulos, las líneas en zig zag donde se expresan los colores blancos, negro, y rojo. Sobre el color el Maestro Rayo opina: “En mi caso los colores puros son letras de un alfabeto que me pertenece. Entonces, el color es una redundancia, me quedo con la cosa pura, con la cosa directa y elemental”.

Su obra demuestra que el arte geométrico pertenece al pasado ancestral como al futuro. Ómar Rayo utiliza el rastro de los ancestros indígenas, para descubrir nuevas maneras presentar cuadros visuales y geométricos.

Ómar Rayo, demuestra que el arte geométrico no es necesariamente frío y racional, que se pueden hallar en esos patrones visuales, formas sumamente apasionadas, ardientes, alegres, lúdicas y sensuales. Esta obra nos muestra que todo el universo está relacionado, que hay una madeja difícil que se teje como en punto de cruz sobre un panel minuciosamente estructurado, que hay una tela secreta y subyacente en el tapiz esplendoroso y trágico de la existencia humana.

Rayo, realizó más de 200 exposiciones en Japón, Hungría, Polonia, Francia, Alemania, España, Noruega, Italia, Estados Unidos, México, China, Brasil, Puerto Rico, Costa Rica, Ecuador, Perú, Chile y Venezuela.

El Maestro Rayo, introdujo el lenguaje del pensamiento artístico geométrico. Su trabajo abrió nuevas fronteras al arte colombiano y lo llevó a relacionarse con grandes figuras del arte latinoamericano de su generación. En 1994 recibió la orden de Boyacá en el Grado de “Gran Oficial que otorga el congreso colombiano”.

Ómar Rayo fallece a la edad de 82 años, el 7 de junio de 2010 a causa de un infarto, dejando un legado que nos acompañará por siempre. Sus restos mortales descansan en su querido pueblo de Roldanillo (Valle del Cauca), Colombia.

Fue un hombre grandioso, extraordinario y muy generoso con sus ideas. Un intelectual que nos deja un gran tesoro el cual debemos valorar. Su legado de intaglios característicos desarrollando un universo geométrico arraigado en el primitivismo abstracto del arte precolombino es motivo de orgullo nacional. Llevo sus obras a más de 22 países finalmente entregándole el más grande y memorable trofeo, fruto de su esfuerzo a su ciudad natal Roldanillo, el “Museo Rayo” donde en la actualidad se exponen más de dos mil de sus piezas y su colección privada de otros artistas como Goya, Pablo Picasso, José Luis Cuevas, Miro y Botero.