Fisiólogo
Iván Pávlov
Biografía de Iván Pávlov
Iván Pávlov (14 de septiembre de 1849 – 27 de febrero de 1936) fisiólogo. Nació en Riazán, Rusia. Su padre era un pope ortodoxo y su madre una ama de casa. Desde muy joven Iván fue muy inteligente. Cuando se graduó de la escuela empezó a estudiar teología, por consejo familiar, pero luego entendió que este no era su camino, Pávlov encontró gran interés en las lecturas de Charles Darwin, y la abandonó para ingresar en la Universidad de San Petersburgo y estudiar medicina y química.
Al graduarse decidió profundizar sus conocimientos, emprendiendo un viaje a Alemania, donde se especializó en fisiología intestinal y en el sistema circulatorio. En 1890 logró ganar una plaza como profesor de fisiología en la Academia Médica Imperial. Pronto consiguió un trabajo como director de los laboratorios del Instituto de Medicina experimental, fue director por casi toda su vida, aproximadamente cuarenta y cinco en donde llevó a cabo magnificas investigaciones, tales como las que se referían al aparato digestivo y a los reflejos condicionados.
Desde joven se dejó atrapar por la impresionante obra de Sechenov que se enfocó en los reflejos cerebrales. Así que, Pávlov empezó sus trabajos acerca de la inervación cardiaca y sobre la autorregulación de la presión sanguínea. Desde 1888 tomó la decisión de consagrarse en el estudio de las funciones digestivas. Pávlov realizó grandes aportes en esta rama de la medicina al crear y luego perfeccionar técnicas fisiológicas asombrosas para los ojos de los científicos de su época.
Gracias al método de la “experimentación crónica”, logró desarrollar importantes investigaciones sobre el páncreas, el hígado y las glándulas salivales. Pero debemos afirmar que las más notables fueron las concernientes a la actividad secretora del estómago. Pávlov tuvo que aislar una parte de este órgano para realizar esta investigación a este le llamaron “el pequeño estómago de Pávlov”. Gracias a esta investigación, que resultó ser una de las más importantes conquistas científicas del siglo XIX, Pávlov fue merecedor del premio Nobel en 1904.
Su nombre ha sido identificado, sobre todo, por la formulación de la ley del reflejo condicionado, que desarrolló después de indicar que la salivación de los perros que manipulaba en sus experimentos quizá era resultado de una actividad psíquica. Luego de un experimento que solo necesitó una campana, comida para perro y un perro, entendió que el perro respondía al estímulo de la campana y su salivación aumentaba en dicho momento.
Pávlov realizó un análisis psíquico del animal, y estudió profundamente su capacidad de diferenciar los estímulos y de responder a ellos. Ahora bien, lo que hizo Pávlov fue de gran importancia porque permitió la apertura de nuevos conocimientos de la psicología, la psiquiatría e inclusive la pedagogía, ya que empezó a considerarse toda forma de educación como esencialmente basada en la formación de los reflejos condicionados. Para ese momento empezaron a surgir teorías en que el proceso de aprendizaje y del conocimiento eran el resultado de una multitud de reflejos condicionados a lo largo de la vida.
Sus investigaciones llegaron a varios centros académicos del mundo, tales como Estados Unidos, abriendo una profunda brecha con la concepción freudiana de la voluntad. Aunque, no fue algo completamente nuevo porque la fisiológica ya había empapado la psicología en las manos del filósofo alemán Ernst Heinrich Weber en la primera mitad del siglo XIX. Todos los análisis e interpretaciones sobre la interpretación de las impresiones sensoriales quedaron recogidas en la llamada ley de Weber.
Pávlov tuvo que afrontar la etapa de la guerra civil y el advenimiento del comunismo, por suerte este científico no tuvo percances con los comunistas y por ende su trabajo no se vio afectado como sucedió con otros científicos que rechazaron el régimen comunista. Al no publicar su poco afecto al nuevo régimen, los comunistas, valoraron su talla como científico, y apoyaron sus labores científicas. En tal sentido, los comunistas no dudaron en aplicar la teoría del reflejo condicionado de Pávlov, lo hicieron en puntos inimaginables y sorprendentes: el condicionamiento de seres humanos, efectuado en el sistema carcelario soviético.
En la década del treinta, Pávlov luego de varias investigaciones publicó el principio según el cual la función del lenguaje humano es resultado de una cadena de reflejos condicionados que contendrían palabras. Muy pocas figuras han sido homenajeadas en vida, en agosto de 1935 se celebró por parte de la Unión Soviética el Congreso Mundial de Fisiología en Moscú y Leningrado al cual asistieron más de 900 científicos del mundo.
Iván Pávlov fue mencionado como el fisiólogo más importante del mundo. Pávlov fue responsable de emitir unas sentidas palabras de agradecimiento, en donde expuso su amor por la experimentación. En menos de un año la vida de Pávlov terminó por causa de una neumonía el 27 de febrero de 1936. Su cuerpo fue enterrado en San Petersburgo, Rusia. En su memoria se bautizó un cráter lunar con su nombre.