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Militar

Ignacio Zaragoza

Ignacio Zaragoza
Dominio Público

Biografía de Ignacio Zaragoza

Ignacio Zaragoza Seguin nació el 24 de marzo de 1829 y murió el 8 de septiembre de 1862. Es reconocido por haber participado en la Batalla de Puebla, donde el ejército mexicano se enfrentó y se impuso ante el que era conocido entonces como el mejor ejército del mundo, la armada francesa, liderada entonces por Napoleón III.

Su nacimiento ocurrió en el Presidio de la Bahía del Espíritu Santo, en el entonces estado mexicano de Coahuila y Texas, aunque actualmente ese sitio se conoce como la ciudad de Goliad, la cual está en Texas, Estados Unidos. Fue el segundo de los hijos de Miguel Zaragoza Valdés, proveniente de Veracruz, y de María de Jesús Seguin Martínez, oriunda de San Antonio de Béxar y familiar de Juan José Erasmo Seguin. Sin embargo, su familia debió mudarse a causa de la guerra de independencia de Texas, en la que su padre Miguel Zaragoza combatió como soldado de infantería, y donde los rebeldes de Texas finalmente obtuvieron la victoria debido al apoyo de los Estados Unidos de América. Es así como los Zaragoza Seguin pasaron primero por Matamoros en 1834, para luego instalarse en la ciudad de Monterrey en 1844. Aquí Ignacio se inscribió en el seminario, pero lo abandonó dos años después tras reconocer que no servía para la vida eclesiástica.

Un año después, Estados Unidos invadió México, por lo que Ignacio Zaragoza quiso enlistarse como cadete en el ejército mexicano, pero no se lo permitieron. Más tarde, Ignacio se uniría a la Revolución de Ayutla, levantada para combatir a Antonio López de Santa Anna. De esta forma entró por primera vez en las fuerzas liberales, donde habría de estar toda su vida. Ya para 1953, el ejército de Nuevo León contaba con él en sus filas como sargento. Cuando este se incorporó al Ejército Mexicano, se le promovió a Zaragoza a capitán.

Para 1957, contrajo matrimonio con Rafaela Padilla de la Garza, con la que tuvo tres hijos: Ignacio Zaragoza Padilla, en 1857; Ignacio Estanislao Zaragoza Padilla, en 1858; y Rafaela Zaragoza Padilla, en 1860. Para esta misma fecha, junto a un pequeño grupo de partidarios liberales, apoyó la Constitución de 1857. Es así como Zaragoza entra en la llamada Guerra de Reforma, en la que derrotó primero a los hombres de Leonardo Márquez, en la ciudad de Guadalajara, estado de Jalisco; y en la que más tarde derrotaría al ejército conservador en la batalla de Calpulalpan, estando al servicio del general Jesús González Ortega. Más tarde ofició como ministro de Guerra durante la presidencia de Benito Juárez, hasta 1861. Un año después, moriría de pulmonía su esposa Rafaela Padilla de la Garza.

En 1862, las tropas francesas de Napoleón III llegaron a México con el fin de tomarse el país e instaurar un imperio con Maximiliano de Habsburgo y Carlota Amalia como monarcas. Ante esto, Ignacio Zaragoza, siendo ya general y comandando el Ejército de Oriente, les hizo frente en la Batalla de las Cumbres, en Acultzingo. Sin embargo, en medio de la lucha supo que lo mejor era retirarse a Puebla, donde, aprovechando la situación geográfica de la ciudad, tendría más posibilidades de ganar. Es así como el 5 de mayo de 1862 se lleva a cabo la famosa Batalla de Puebla, donde Zaragoza, junto a Miguel Negrete, Felipe Berriozábal y Porfirio Díaz, logran hacer retroceder a los franceses. Aquellos soldados que consiguieron huir, fueron ultimados por indígenas zacapoaxtlas en las inmediaciones de Puebla. Rápidamente, la noticia llegó a Europa, donde todos quedaron atónitos al saber que el mejor ejército del mundo había sido derrotado, pues la última vez que había ocurrido fue en 1815, cuando Napoleón Bonaparte sucumbió ante las fuerzas unidas de Inglaterra, Prusia y Rusia en la Batalla de Waterloo.

Sin embargo, pese a su gran éxito militar, Ignacio Zaragoza enfermó de tifus murino debido a los piojos que contrajo por la falta de higiene en las batallas que había llevado a cabo. Por ello, ese mismo año murió el 8 de septiembre. En las fechas siguientes, su cuerpo fue trasladado a Ciudad de México, al Museo Panteón de San Fernando, y fue erigido un monumento en su honor. Poco después, en 1867, el segundo emperador mexicano, Maximiliano I de México, fue fusilado por las fuerzas liberales luego de interrogarlo y encontrarlo culpable de múltiples delitos contra la patria. Más tarde la ciudad de Puebla fue renombrada como Puebla de Zaragoza por orden del entonces presidente Benito Juárez. Mucho tiempo después, en 1976, los restos de Ignacio Zaragoza fueron trasladados a Puebla, en la Zona de los Fuertes, donde se construyó un monumento para sus despojos y para los de su esposa, Rafaela Pardilla, que también fueron trasladados. Este cambio de sitio se debió a que Pueblo fue el lugar donde desempeñó la mayor de sus hazañas: salvar a México de la invasión francesa.

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