Escritores

Georges Perec

Biografía de Georges Perec

Georges Perec  (7 de marzo de 1936 – 3 de marzo de 1982) escritor. Nació en la capital francesa, París. Su descendencia es judía. Fue criado por sus tíos desde muy pequeño porque su padre murió, el 16 de junio de 1940, como soldado en un combate del XII Regimiento Extranjero de Infantería contra los alemanes en la Segunda Guerra mundial, y su madre fue asesinada por los nazis en el famoso campo de concentración de Auschwitz. Sus tíos le brindaron la mejor educación que estuvo a su alcance, en ese sentido, Perec estudió en el colegio Geoffroy-Saint-Hilaire d’Étampes. Al salir del bachillerato estudió Psicoterapia y posteriormente Historia en La Sorbona, aunque ninguno de ellos fue culminado. Se dedicó a la escritura trabajó entonces en La Nouvelle Revue Française y Les Lettres Nouvelles.

Pero tuvo que abandonar el cargo para prestar el servicio militar en el XVIII Regimiento de Paracaidistas, ubicado en el sudoeste de Francia. Años después, comenzó a trabajar como bibliotecario en el departamento de neurofisiología del Centre Nacional des Recherches Scientifiques. En sus horas libres se dedicó a frecuentar el grupo literario Oulipo, del que después fue miembro. En este momento, como una apuesta loca y espontanea le aseguró a sus compañeros del grupo literario que escribiría una novela sin usa la letra e, de este experimento surgió La disparition (1969).

Luego, se trasladó con su primera esposa Paulette Pétras a Túnez, estando allí publicó La vida: instrucciones de uso, mientras se desempeñó como archivista en el Laboratoire Associe 38 del CNRS, dedicado a la investigación médica. Para suplir sus necesidades económicas escribió para varios medios y redactó varios artículos de manera esporádica. Perec conoció a la cineasta Catherine Binet, por quien decidió abandonar a su esposa y empezar una nueva relación en 1976, quien lo acompañó durante los últimos seis años de su vida.

Consiguió luego un trabajo como bibliotecario; era aburrido y rutinario por eso lo alternó con el radio y el cine, y publicó crucigramas en Le Piont. Con algunos ahorros, decidió abandonar su trabajo en 1978 para dedicarse exclusivamente a escribir. A los pocos meses obtuvo el Premio Renaudot gracias a su novela, Las cosas. Este libro es comprendido como una magnífica ilustración de la cosificación de nuestra sociedad, donde el hombre se esclaviza en diversas cosas, que le van generando un progresivo embrutecimiento. Esta obra fue catalogada como sociología, aunque siempre afirmó que no era un estudio sociológico.

Y posteriormente ganó el premio Médicis con la publicación La vida: instrucciones de uso (1987), novela galardonada con el Premio Médicis. Desde entonces se dedicó plenamente a la literatura, y tiempo después se publicó Un recuerdo de infancia (1975). Continúo varios años publicando y redactando artículos. A partir de finales de 1870 su salud comenzó a empeorar pero Georges no prestó mucha importancia a esto. En el año de 1982 acudió al hospital debido a fuertes dolores y se enteró de que tenía un cáncer de pulmón que se encontraba en una etapa avanzada, había hecho metástasis. Finalmente, Perec falleció en Ivry-sur-Seine el 3 de marzo de 1982

. Luego de su muerte se realizaron varias publicaciones póstumas, al menos 18 volúmenes y que se sumaron a los 17 títulos que había publicado en vida.

Dichos libros póstumos, incluyen desde artículos circunstanciales hasta verdaderos relatos, también entrevistas, cartas, textos de tarjetas postales, notas personales, prólogos, reseñas bibliográficas, grabaciones de conferencias, respuestas a encuestas y apostillas de todo tipo. Existen muchas obras que no se han podido rescatar. Sus obras usualmente se fundamentan en la rama sociológica: cómo mirar lo cotidiano; en el orden autobiográfico; en la lúdica, y por último, concierne a lo novelesco, a la inclinación por las historias y por las peripecias, al deseo de escribir libros que inserten a los lectores en la historia y se sientan protagonistas de ella. Realmente su obra escrita sin la letra e, fue muy elogiada entre los escritores de su momento.

George Perec funda un nuevo concepto de narración en la que se diluyen los límites genéricos, y logra plantear una suerte de realismo a ultranza que supera los límites de la realidad transfigurándola en algo extraordinario. En esa medida, Perec fue el responsable de crear y dar paso a un nuevo concepto de literatura autobiográfica que menosprecia el aburrimiento que provoca la autonarrativa, la crónica centrada en el autor, y que permitió una nueva mirada sobre los datos que aportan la vida cotidiana y la historia común.

Su obra ha influido en varios escritores de la narrativa contemporánea. Por ejemplo, Italo Calvino, Roberto Bolaño, Enrique Vila-Matas, Mario Bellatín, entre otros. Su obra también ha logrado inspirar artistas de otras disciplinas, en particular artistas plásticos contemporáneos y conceptuales. Por ejemplo el cineasta Raúl Ruiz, Wim Delvoye, Marc Winckler, Christian Boltanski, Sophie Calle, Valérie Mréjen o Édouard Levé.