Tetis, es una de las Nereidas de la mitología griega, comúnmente conocida como los pies argénteos. Hija del Viejo del Mar, Nereo y de la ninfa Dóride, Tetis es una de las deidades acuáticas más respetadas del panteón griego. Educada por Hera y esposa de Peleo, Tetis tendría un lugar destacado la mitología griega por ser la madre del poderoso guerrero Aquiles, quien perecería al ser alcanzado por una flecha en el talón.
Hija de Nereo y de la oceánide, Dóride, Tetis haría parte, junto a sus 49 hermanas, de las Nereidas, conjunto de ninfas acuáticas descendientes del Viejo del Mar. Aunque la mayoría de la información sobre esta concierne a su papel como madre de Aquiles, se ha mencionado en varios escritos su papel como protectora y amiga de Hera, la esposa de Zeus a quien salvó en algunas ocasiones por pedido de su maestra.
Se dice que su relación con la diosa era tan cercana que, en muchas ocasiones, Tetis, salía en su ayuda
Por pedido de Hera, Tetis, también protegería la nave de los Argonautas, Argo. Se ha mencionado, además que, por temor a herir a la diosa, Tetis rechazó a Zeus. Sin embargo, existen diferentes versiones sobre este hecho, se dice que Zeus y Poseidón intentaron conquistarla, pero al escuchar de un oráculo sobre el poder del hijo de la diosa, decidieron abstenerse y permitir que esta entregara su amor al humano Peleo.
Aunque la diosa, inicialmente se mostró reacia a unirse con Peleo, al final accedió. Juntos, Tetis y Peleo, tuvieron siete hijos, de los cuales seis fallecieron poco después de su nacimiento a manos de la diosa, quien temerosa de la mortalidad de sus descendientes, intento convertirlos en inmortales sometiéndolos a un ritual con fuego. Como era esperado, los pequeños bebes fallecieron en las llamas.
Destrozado por la perdida, Peleo decidió interceder en favor de su ultimo hijo con Tetis, el famoso guerrero Aquiles. Cuando este nació, Tetis intento convertirlo en inmortal al igual que lo había hecho con sus hermanos, no obstante, Peleo intervino antes de que este resultara herido por las llamas.
Decidida a convertirlo en inmortal, Tetis lleva a Aquiles hasta la laguna Estigia y una vez allí lo toma por el talón y lo sumerge. Sin embargo, no pudo terminar el ritual debido a la llegada de Peleo. Fue así como el talón de Aquiles quedó vulnerable.
Cansado de estos rituales y preocupado por la seguridad de Aquiles, Peleo decide dejar a la diosa y colocar a Aquiles al cuidado de Quirón. Desde entonces, Tetis cuidaría de Aquiles desde lejos.
Preocupada por la profecía de Aquiles, Tetis intenta proteger al guerrero escondiéndolo inicialmente entre las mujeres durante el reclutamiento. No obstante, el guerrero terminaría participando en el enfrentamiento. Al llegar a la costa, Tetis evita que su hijo baje primero, pues sabe que perecerá al descender. Posteriormente ordenará a Hefestos que fabrique un escudo lo suficientemente fuerte para proteger al héroe, pero todo esto fue en vano, ya que Aquiles falleció al ser alcanzado por una flecha en el talón, tras haberle quitado la vida a Héctor.
Una vez muerto el guerrero, Tetis velo por su nieto Neoptólemo, fruto de la relación entre Aquiles y la doncella Deidamía.