Biografía de Sarah Bernhardt

Sarah Bernhardt (23 de octubre de 1844 – 26 de marzo de 1923) actriz de teatro. Nació en París, Francia. Su nombre de bautizo fue Henriette Rosine Bernard. Provenía de una familia judía de origen holandés, aunque fue bautizada y educada en la religión católica por disposición de su padre. Fue entonces enviada al monasterio de Grands Champs, en Versalles. Comenzó a actuar en funciones teatrales colegiales. Luego en 1858, estudió interpretación en el Conservatorio de París bajo la enseñanzada de Prevost y Samson. Allí obtuvo el premio de comedia y tragedia.

Bernhardt comenzó a ser muy popular por sus buenas interpretaciones en la tragedia y el melodrama. Contrajo matrimonio con Jacques Damala en 1882, aunque ya tenía un hijo, y se separó de él al año siguiente. Su primera actuación en la Comédie Française fue en Iphigénie, de Jean Racine. Luego estuvo en Un mari qui lance sa femme en 1863. Su espíritu independiente hizo que saliera de París para trasladarse a España por un tiempo.

Cuando volvió a tierras francesas entró en el Odéon gracias a la protección de Camilo Doucet y de Duquesnel y debutó como Silvia en Le jeu de l’amour et du hasard, dirigida por Marivaux (1866). Poco a poco, logró cautivar al público con su actuación su perfecta dicción y armoniosa voz estuvo en obras como Athalie, Ruy Blas, Rey Lear y Le Passant. Abandonó temporalmente el teatro para adelantar una causa filantrópica y humanitaria: organizó un hospital para los heridos durante la guerra franco-alemana en el cerco de París.

En 1872 volvió a la Comédie Française, pero las condiciones eran paupérrimas, así que se convirtió en sociétaire. La primera obra que hizo en esta nueva etapa en la Comédie fue Mademoiselle de Belle-Isle, y luego Britannicus, con la que tuvo mayor éxito. A partir de entonces su popularidad creció: su voz se hizo famosa como la voix d’or. El público llenaba los teatros y la idolatraba. Un año antes de la década del 80 debutó en Londres con la compañía de la Comédie Française. Tiempo después, cansada del trabajo metódico de la compañía, presentó su renuncia a su puesto de sociétaire. Se retiró a una casa que tenía cerca del Havre. Perrin, gerente de la Comédie, la demandó. Ella tuvo que pagarle una indemnización de 100.000 francos.

Sarah Bernhardt montó su propia compañía en 1880, realizó varias giras por los Estados Unidos. Fue durante un viaje cuando se casó con el actor de origen griego Jacques Damala. De regreso a París, dirigió una compañía en el Théâtre Ambigu en 1881 con su hijo Maurice; montó otra compañía en el Théâtre du Porte Saint-Martin. Realizó varios estrenos: Fédora, de Sardou, en el Vaudeville (1882); Nana Sahib, de Richepin (1883), en el Théâtre du Porte Saint-Martin; y Macbeth, de Shakespeare (1884).

Publicó un artículo titulado: El idealismo y el realismo en el arte. Por aquel entonces una de las actrices de la compañía escribió Les voyages de Sarah Bernhardt en América y una segunda parte, Mémoires de Sarh Barnum, en las que criticaba los duros castigos que Bernhardt tenía con las actrices. Bernhardt reunió fondos para los heridos de la Primera Guerra Mundial, periodo en que sufrió la amputación de la pierna derecha. Recibió la Légion d’Honneur en 1913. La muerte la sorprendió el 26 de marzo de 1923 mientras estaba en el rodaje de La boyante.  La actriz no sólo se destacó en el campo de la interpretación sino en el de las artes plásticas y la literatura; publicó guiones de teatro, relatos y narraciones de otros tipos. Su fama le permitió tener gustos excéntricos, solía viajar en globo, ordenó que a su muerte debía ser enterrada en un lujoso ataúd, forrado de terciopelo violeta. Es recordada como una artista integral y de gran belleza, con una inmensa presencia escénica, independiente y culta.