Científicos
Manuel Elkin Patarroyo
Biografía de Manuel Elkin Patarroyo
Manuel Elkin Patarroyo (3 de noviembre de 1946) científico y médico, director del Instituto de Inmunología de Colombia. Nació en Ataco, Tolima, Colombia. Su familia era realmente extensa, sus padres tuvieron 13 hijos todos criados en una finca de este bello municipio. Cuando llegó a la pubertad llegaron a la ciudad de Bogotá buscando mejores condiciones de vida y también huyendo de la violencia. Así que Manuel ingresó al colegio José Max León de donde se graduó. Se destacó por ser un joven muy inteligente y curioso, su curiosidad por las vacunas comenzó cuando su padre le regaló un cómic sobre la vida de Louis Pasteur.
Empezó sus estudios en medicina en la importante Universidad Nacional de Colombia, se graduó en el año 1971. Y luego obtuvo su doctorado en medicina y cirugía. Para ese momento contrajo matrimonio con la pediatra María Cristina Gutiérrez, con quien tuvo tres hijos. Luego Manuel se trasladó a Estados Unidos, específicamente a estudiar una especialización en Inmunología en la Universidad de Yale. Luego obtuvo un PhD en el Rockefeller Institute y de postdoctorado en el Instituto Karolinska de Estocolmo. Como podemos ver fue un hombre entregado al estudio y a la investigación que era su pasión.
El momento más esperado por Patarroyo llegó cuando montó junto a varios médicos un laboratorio en el Amazonas para hacer moléculas y ensayarlas en micos, los Aotus trivirgatus, esta idea ya había sido estudiada desde Estados Unidos. Allí, comenzaron un periodo de experimentos y fórmulas fallidas. Luego de varios meses por fin obtuvo la primera vacuna contra la malaria, denominada SPF-66, vino la fase de experimentación con humanos, muchos de ellos jóvenes que prestaban el servicio militar en Colombia. En total fueron 50.000 individuos de distintos países que fueron objeto de estudio para verificar su efectividad.
Pero la efectividad de la vacuna era del 50%, por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) la cataloga como inactiva. Patarroyo siguió sus investigaciones con el fin de aumentar la efectividad de la vacuna de la malaria, para ello tuvo que seguir experimentando en los animales mencionados anteriormente. Desde ese momento hasta la actualidad se cuentan alrededor de 20.000 monos que fueron objeto de experimentación. Ahora bien, varios años después se empezaron a crear controversias y visiones en contra de estas acciones.
Debido a que desde ese momento ha disminuido esta especie, se han encontrado muchos casos de comercio ilegal en Colombia, Brasil y Perú. Se han levantado acusaciones por irregularidades cometidas por el equipo de investigadores de la Fundación Instituto de Inmunología de Colombia bajo la dirección del científico colombiano. Este caso es estudiado por La Corporación para el Desarrollo Sostenible del Sur de la Amazonía (Corpoamazonía). Por otro lado, muchos investigadores colombianos atacan a Colciencias entidad que maneja los fondos para la investigación en Colombia, afirmando que la cantidad de dinero que se invierte en la vacuna de la malaria es exponencial en comparación a los recursos que se le dan a cientos de investigadores.
Se ha entregado a Patarroyo entre el 80 y el 95 por ciento del total de los recursos destinados a investigaciones en salud. Para el año 2011, Manuel Patarroyo dio a conocer a la Colfavac, que había comprobado una efectividad superior al 90% en monos y empezaría la fase de experimentación en humanos. También ha realizado informes detallados sobre este proceso, muchos han sido publicados en revistas indexadas, tales como la revista estadounidense Chemical Reviews en donde se publicó que el científico había encontrado los principios químicos que permitirán crear vacunas sintéticas para prevenir prácticamente todas las enfermedades infecciosas existentes en el mundo, estas son: tuberculosis, papiloma humano, dengue, hepatitis C, lepra, entre otras.
Por su labor Patarroyo no solo ha sido mostrado por el gobierno como un orgullo nacional, sino que internacionalmente también ha sido premiado y exaltado en otras partes del mundo. Ha ganado importantes premios y reconocimientos: doctorados honoris causa por las universidades Nacional, del Tolima y Metropolitana de Barranquilla; el Premio León Bernard otorgado por la OMS; fue nombrado académico de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de Madrid, y, ha recibido varias condecoraciones, las de Caballero de la Orden de San Carlos y Simón Bolívar, ambas de Colombia.
A pesar de esto, se ha determinado en el año 2012 que el científico y su grupo deben frenar la experimentación con animales, decisión ratificada por el consejo de estado colombiano en noviembre de 2013. Esta decisión también ha sido apoyada por varios académicos europeos. Pero, esto solo duro varios años porque el consejo de estado autorizó nuevamente el uso de primates para sus investigaciones científicas. En el año 2016, el Dr. Patarroyo fue condecorado con el doctor honoris causa de la Universidad Ricardo Palma, este acto tuvo varios incidentes porque hubo una conglomeración de personas ambientalistas y animalistas que se manifestaron en su contra.
Los ecologistas respaldaban sus acusaciones con base a denuncias en SERFOR de Perú, para las cuales el investigador no tuvo respuesta alguna. La polémica no ha terminado, es conocido el impacto que ha ocasionado la investigación de Patarroyo en la especie del mono nocturno y la devastación ambiental. Patarroyo también a lo largo de su carrera ha adelantado estudios sobre el lupus, los marcadores genéticos, la leucemia, la susceptibilidad genética de la fiebre reumática, la tuberculosis y la lepra.