Biografía de Leon Battista Alberti

Leon Battista Alberti (18 de febrero de 1404 – 25 de abril de 1472) arquitecto, secretario personal del papa Eugenio IV, Nicolás V y Pío II, humanista, tratadista, matemático y poeta. Nació en la ciudad italiana de Génova. Es considerado uno de los humanistas más polifacéticos del Renacimiento. Su padre era Lorenzo Alberti, miembro de una pobre familia de comerciantes florentinos. Alberti estudió en Letras en Venecia y luego en Padua, pero decidió dejarlos y estudiar Derecho en la Universidad de Bolonia. Fue muy hábil para la música, la pintura, la escultura, las matemáticas, y la filosofía.

Desde sus primeros años de vida se dedicó a la literatura. De ahí que en Bolonia escribiera una comedia autobiográfica en latín: la Philodoxeos fabula (Amante de la Gloria), esta fue firmada bajo el nombre de Lépido. También en latín compuso diálogos, aunque fueron difundidos bajo el anonimato y luego de un tiempo se le adjudicaron a Luciano de Samosata. Posteriormente escribió Deifira, inspirada en sus experiencias personales. Vinieron varios problemas económicos para Alberti por la muerte de su padre y el distanciamiento con su familia. En esta época Alberti fue ordenado sacerdote, y la desempeñó en la Santa Sede. En 1431 se convirtió en secretario del patriarca de Grado.

Luego se trasladó a Roma, en donde fue nombrado abreviador apostólico. Mantuvo este cargo por 34 años, viviendo entre Roma, Ferrara, Bolonia, Florencia, Mantua y Rímini. Durante este periodo redactó cuatro libros en lengua vulgar, el más importante: los Libros de la Familia, considerados su obra maestra. El libro demuestra una visión de los principales aspectos de la vida social de la época, el matrimonio, la familia, la educación, la gestión económica de la familia, las relaciones sociales. Alberti fue un gran defensor de la lengua vulgar, a la que consideraba más adecuada a las exigencias de una sociedad naciente en permanente transformación, aunque no desmeritó el gran valor cultural y las cualidades expresivas superiores del latín.

En lengua vulgar también escribió La experiencia del Certame coronario (1441), una competición de poesía dedicada al tema de la amistad. Alberti desarrolló diversas liricas recogidas y publicadas sucesivamente con el título de Rimas, casi todas de tema amoroso, se caracterizaron por su originalidad tanto en su estilo como en la métrica; se le llamó métrica “bárbara”. También se desempeñó como arquitecto para su amigo íntimo Giovanni di Paolo Rucellai, comerciante y humanista. Realizó varios trabajos importantes para él, por ejemplo, la fachada de la iglesia de Santa Maria Novella (1456). Alberti logró integrar elementos de épocas anteriores las tendencias del momento.

También realizó la construcción del Palacio de la familia Rucellai. Su intervención se centró en la fachada, sobre una base que imita el opus reticulatum romano. Ahora bien, el palacio fue magníficamente realizado por ello se convirtió en modelo de las siguientes construcciones de residencias señoriales. También es responsable de la construcción de la iglesia San Andrés en Mantua. También se dice que la Villa Médicis de Fiesole es fruto de un proyecto ideado por Leon Battista Alberti, y no se le atribuye a Michelozzo. El hecho es que La Villa Médicis de Fiésole tenía numerosos elementos innovadores que la convierten en el primer modelo de residencia suburbana y de jardín totalmente renacentista.

En 1450, se trasladó a Rímini para cumplir un encargo de Segismundo Malatesta, quien le delega el trabajo de transformar la iglesia de San Francisco en un templo cristiano, el llamado Templo Malatestiano. Alberti creó, para integrar la antigua iglesia un muro inspirado en modelos romanos, aunque también tomó modelos gótico-venecianos. También trabajó para Ludovico Gonzaga en el año 1459 en Mantua. Realizó la iglesia de San Sebastián. Tiempo después erigió el templete del Santo Sepulcro en la iglesia de San Pancracio de Florencia. No siempre realizó construcciones religiosas también trabajó en la parte trasera del Palacio Municipal ubicado en Ferrara. Luego de ese momento continuó sirviendo a la curia romana hasta 1464.

Alberti también dejó sus conocimientos plasmados en varios tratados teóricos, gracias a estos hoy podemos estudiar su pensamiento artístico. Dedicó una obra a Brunelleschi, De Pictura (1436). En este tratado trata de dar reglas sistemáticas a las artes figurativas, el tratado se basa principalmente en Euclides. Luego escribió otro tratado que habla sobre la pintura y las composiciones dividiéndolas en: Circumscriptione, Compositione, Receptione di lumi. Otro de sus tratados se refiere a la formación y del modo de vida del artista. Luego escribió los Apologi, en latín, y el Momus, sive De príncipe.

Alberti fue, como Leonardo da Vinci, una de las figuras más representativas del hombre del Renacimiento. Tras una intensa vida en la que se había destacado en múltiples disciplinas, Alberti muere el 25 de abril de 1472 en Roma. Realmente su trabajo influyó a los siguientes arquitectos de Europa. Con su libro De Re Aedificatoria (1485) logró marcar un cambio en la arquitectura ya que este era el primer tratado sobre arquitectura del renacimiento, un texto que fue sometido a varias traducciones y que en la actualidad sigue siendo una fuente de mucho valor.