José Carlos Mariátegui (14 de junio de 1894 – 16 de abril de 1930), político y pensador peruano. Nació en Moquegua, Perú. Su padre era Francisco Javier Mariátegui Requejo y su madre era María Amalia La Chira Ballejos. Vivian en un hogar humilde. En 1899, su familia se trasladó a Huacho, al norte de Lima. Un día el pequeño José sufrió un accidente que le causó anquilosis en la pierna izquierda, disminución del movimiento en una articulación, esta situación lo afectaría por el resto de su vida. Así que, no podía ya realizar las actividades que normalmente realiza un niño, y comenzó a dedicar su tiempo libre en la lectura. Con solo 15 años y sin acabar el colegio, por su gran habilidad para la escritura comenzó a trabajar en la prensa, formándose empíricamente como periodista.
Su destreza lo llevó a escribir en la mítica revista Colónida, hacerse amigo de Abraham Valdelomar e incluso a escribir un libro de poemas, el cual nunca fue publicado. También escribió artículos y crónicas sobre diversos temas. Su participación en la política, desde 1909, influyó en su labor como periodista. Esto lo observamos en su revista Amauta, gran difusora del pensamiento y la crítica a nivel social y político. Entonces, su producción cambió radicalmente a partir de 1918, influenciado por Manuel Gonzales Prada, escribió, con gran sustento intelectual y argumentativo, sobre temas sociales como la reforma universitaria y las luchas obreras, vinculándose con figuras como César Vallejo, Víctor Raúl Haya de la Torre, Raúl Porras Barrenechea o Luis Alberto Sánchez.
Además de Amauta, fundó la revista Nuestra Época y el diario La Razón. Por su gran reconocimiento, lo eligieron vicepresidente del Círculo de Periodistas, desde allí fue un gran impulsador de las reivindicaciones obreras y promovió el Comité de Propaganda Socialista. Su activismo político era un arma en contra para el gobierno, así que, estratégicamente el presidente Augusto B. Leguía, otorgó una beca de estudio en Europa. Fue en Italia donde completó su formación socialista, estudiando marxismo e idiomas, se relacionó con intelectuales de la época y conoció el amor, Ana Chiappe, con la que rápidamente contraería matrimonio. De esta unión nacen sus hijos: Sandro, Sigfrid, José Carlos y Javier Mariátegui Chiappe.
Posteriormente, Mariátegui viajó a distintas ciudades del continente europeo: París, Berlín, Viena y Budapest, respectivamente. En uno de sus destinos conoció al pensador Antonio Gramsci, su pensamiento le ayudó a madurar su proyecto de renovación de la izquierda latinoamericana. También se inspiró en el filósofo Oswald Spengler. En 1924, a causa de su padecimiento, su pierna izquierda fue amputada. Un año después, publica su primer libro titulado, La escena contemporánea, una compilación de crónicas y artículos.
De vuelta en su país natal, Mariátegui sirvió como colaborador de revistas literarias como Mundial y Variedades. Por el tipo de escritos publicados fue acusado de conspirar contra el gobierno de Leguía y arrestado en 1927. Luego de una fuerte presión social y una defensa admirable redujeron su condena a arresto domiciliario. Sus bríos nunca se fueron, un año después emprende la organización del Partido Socialista. A las reuniones de su Partido, invitó eminencias como Víctor Raúl Haya de la Torre
Mariátegui aprovecho también su papel como catedrático en la Universidad Popular Manuel González Prada para impulsar y difundir el pensamiento socialista. Simultáneamente dirigió la revista Claridad. Tenía en sus manos la difusión de su ideología por vía escrita y oral. Se aventuró a establecer un partido marxista-leninista, del que fue secretario general, aunque su posición muchas veces distaba de los pensamientos de algunos dirigentes de la Internacional Comunista.
Uno de sus escritos más importantes es: Los 7 ensayos de interpretación de la realidad peruana, donde analiza los procesos de la economía, la historia y la literatura peruana, publicada en 1927. Esta flamante obra fue publicada por su propia editorial, Minerva. Para sus publicaciones en las diversas revistas a su cargo, juntó relevantes intelectuales de la época y dio vida a la corriente indigenista, expresada en los campos del arte y literatura. Tuvo cierta alianza con Haya de la Torre, pero esta se disolvió. Por su exitosa obra fue invitado a la Conferencia Comunista de Latinoamérica en Montevideo. Pero su delicado estado de su salud impidió su presencia, aunque envió a un representante.
La muerte lo sorprendió en un momento relevante en el auge de su pensamiento. El 16 de abril 1930, poco antes de viajar a Argentina ser operado a causa de la anquilosis, falleció hospitalizado. Fue enterrado en el Presbítero Maestro ante cientos de admiradores, amigos, colegas y familiares. Su despedida lo develó como un héroe del Perú. Poco más de un mes después, el Partido Socialista cambió su nombre el Partido Comunista.
Mariátegui, fue un pensador y político que forjó e inspiro en adelante a muchos ideólogos, latinoamericanistas y culturalistas. Su método inductivo partió del estudio de los hechos, la realidad y del entorno nacional e internacional. Así, comprendió la situación del Perú y concluyó que la conformación del sistema social debía cambiar, porque marginaba la vida social y económica de los indios. Su pensamiento puede ser reflejado en su esplendor en sus obras como: Peruanicemos al Perú, Temas de nuestra América, Ideología y política, Temas de educación, Cartas de Italia y Figuras y aspectos de la vida mundial.