Cipriano Targioni (1672 – 1748) anatomista. Nació en Florencia, Toscana, Italia. Desde temprana edad desarrolló un gusto por la medicina y las ciencias, especialmente la química y la física. Luego de terminar sus estudios escolares ingresó a la Universidad de Pisa. Targioni fue un estudiante destacado, por ello a su regreso se desempeñó como supervisor de las observaciones y experimentos físicos realizados en la Galleria Medicea por orden de Cosimo III de ‘Medici, Gran Duque de Toscana.
Entre sus investigaciones y aportes se encuentra la preservación de cadáveres de animales para disección anatómica. En otras instancias, Targioni realizó observaciones meteorológicas
José Averani y Cipriano Targioni, discípulos del gran Galileo, adelantaron un experimento que consistió someter el calor de los rayos solares, pasados a través de una lente, algunos diamantes del duque Cosme III de Médicis. Encontraron que el diamante tiene menor resistencia al calor; se volatilizaron de manera total, sin dejar el menor residuo. Posteriormente, muchos investigadores se sintieron atraídos por esta cuestión y continuaron experimentando. El químico francés Lavoisier, hizo lo mismo pero los diamantes estaban dentro de un recipiente sin aire. Las piedras se recalentaron violentamente, pero no se volatilizaron.
Luego las sometió a un fuerte chorro de oxígeno: las piedras preciosas se convirtieron en gas. Sin embargo, Lavoisier no pudo identificar el gas formado por la combustión de los diamantes, pero su hipótesis fue que tenía las mismas propiedades que el anhídrido carbónico que se formaba quemando carbón; y llegó a la conclusión de que entre los diamantes y el carbón debía existir cierta cercanía. Gracias a los avances de Targioni y compañía, otros científicos continuaron investigando este interesante proceso químico. Hasta que se confirmó que el carbón y los diamantes estaban formados por la misma sustancia: el elemento químico Carbono