Armand V. Feigenbaum (6 de abril de 1922 – 13 de noviembre de 2014), empresario. Nacido en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos. Feigenbaum realizó estudios superiores en el Union College donde recibió su título Ingeniero. Luego, decidió continuar sus estudios realizando un doctorado en Economía en Massachusetts Institute of Technology. Con su título en la mano, pudo ingresar al mundo laboral. En 1944 tuvo la oportunidad de ser el gerente de operaciones de manufactura y control de calidad de la compañía General Electric en Schenectady, Nueva York, puesto que ocuparía durante diez años.
Simultáneamente desarrolló su obra más importante: Total Quality Control, en este texto desenvolvió el concepto de Calidad y lo relacionó como un elemento que integra a todos los miembros de la empresa. O sea, que todos los trabajadores tienen responsabilidad con ella. Su buen desempeño le hizo merecedor del cargo de ejecutivo de las operaciones industriales de General Electric a nivel internacional.
Con un bagaje incuestionable decidió en 1968, fundar la compañía General Systems en Pittsfield, Massachusetts, donde cumplió las funciones de presidente hasta su fallecimiento. Este hombre impulsó el control de calidad en los Estados Unidos, además, fue el creador del concepto de Control Total de la Calidad, su nombre fue modificado posteriormente por Administración de Calidad Total. La importancia de su aporte, fue la generación de una nueva manera de competir en el mercado nacional e internacional, tuvo un influjo destacado en su país y en Japón.
Su destacada labor le valió un puesto como Miembro Honorario de la Academia Internacional de Calidad (IAQ)
El libro de Feigenbaum: el Mando de Calidad Total, narra los componentes básicos y problemas de una calidad moderna enfocados en la organización. El libro recibió buenos comentarios por ser bien organizado, comprensivo y conciso. Además, se convirtió, con el tiempo, en un texto fundamental para los estudiantes de administración de empresas. Insiste en que la calidad no solo se encuentra en las manos del departamento de producción, sino que toda la empresa y todos los empleados deben lograrla. Este ejercicio fue conocido como las etapas de la Calidad.
Aunque, el empresario no desmerita la importancia de los métodos individuales como parte de un programa de control, en miras a lograr la Calidad. Armand V. Feigenbaum, hace una aclaración en donde expresa que la calidad no es igual a lo mejor; sino a brindar el mejor servicio y precio para el cliente. Este punto advierte cierta relatividad, dependiendo quien es el cliente y qué significa para él un buen servicio. Sobre el concepto control, advierte que es necesario establecer estándares, pretender siempre mejorar los estándares de calidad, por medio de eficaces métodos de control.
En este sentido, los métodos o enfoques de control son: control de nuevos diseños, control de recepción de materiales, control del producto, estudios especiales de proceso, costos de calidad. Este último, tiene gran relevancia para el economista, primero por su formación. Advierte que es necesario comprender que los costos representan lo que una empresa necesita invertir con el fin de brindar al cliente un producto de calidad. Se encuentran dividas en: costos de prevención y costos de planeación. El primero está centrado en invertir para evitar faltas, así se pueden prevenir más costos. El segundo; se refiere a las inversiones de entrenamiento, revisión de nuevos productos, reportes de calidad, e inversiones en proyectos de mejora.
Dio varias conferencias en su país, en donde se le contacta para hablar sobre los pasos hacia la Calidad, que él ha estipulado en tres pasos: liderazgo en Calidad, la calidad tiene que ser escrupulosamente planeada en términos definidos. Esta propuesta va en contra del tradicional enfoque hacia las fallas o defectos. Es necesario que los directivos procuren una focalización constante en la conservación de la calidad, para lograrlo un vehículo efectivo es implementar un programa de círculo de calidad, aseguró Feigenbaum.
Otro de los pasos: Técnicas de calidad modernas, marcó una ruptura entre los métodos de las empresas tradicionales en donde se relega solo a un departamento el control de calidad, siendo esto inútil. Por el contrario, en una empresa moderna, todos los miembros de la organización deben ser responsabilizarse de la calidad de su producto o servicio. Desde el proceso el personal de oficina, los ingenieros hasta los operarios de planta deben influir en la Calidad, desde sus posibilidades, la idea es conseguir un performance libre de fallas o defectos.
El último paso se refiere al compromiso de la organización, para lograr dicha acción la motivación es un factor fundamental, la empresa debe velar por capacitar a su personal para poder generar en ellos el espíritu de compromiso. Todos deben ver la calidad como un elemento estratégico de planificación empresarial. Dichos postulados fueron valorados por los estudios de su momento y las futuras generaciones. Por ello, recibió varios reconocimientos, como Medalla de Edwards en 1965 y la Medalla Nacional de Tecnología e Innovación en 2007.
También fue invitado a ser miembro de la Asociación Nacional de Industriales de Seguridad Premio al Mérito, miembro de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia, miembro vitalicio del Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos, miembro vitalicio de la Sociedad Americana de Ingenieros Mecánicos y miembro vitalicio de Plymouth Sociedad de Biología Marina. Su vida como empresario terminó a causa de una enfermedad que luego quitó su vida el 13 de noviembre de 2014.