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Historia de La Segunda Guerra Mundial La Segunda Guerra Mundial (1939-1945) enfrentamiento bélico de nivel mundial entre las potencias del Eje (Alemania, Italia, y Japón) y los aliados (Francia e Inglaterra), posteriormente a este bando se integró Estados Unidos, la Unión Soviética, y China. Causas de la Segunda Guerra Mundial Las causas son múltiples: conflictos no resueltos luego de la Primera Guerra Mundial, las graves dificultades económicas en el periodo de posguerra y la Gran Depresión. Por otro lado, surgió un debilitamiento del sistema liberal; surgieron varias corrientes fascistas en Italia y Alemania, estas desarrollaron varias tendencias expansionistas. En definitiva, la Segunda Guerra Mundial fue una suerte de rendición de la «Gran Guerra». Esto porque, la forma en que culminó la guerra (el Tratado de Versalles) se dio en condiciones abusivas impuestas unilateralmente por los vencedores a los vencidos lo que acrecentó las tensiones. El fascismo italiano y el nazismo alemán comenzaron a tomar fuerza. Así que, Adolf Hitler adelantó doctrinas como la del «espacio vital» que hacían parte de un revanchismo suscitado por el Tratado de Versalles y el deseo de expandirse utilizando la fuerza, esto sustentado en la necesidad inexcusable de obtener un ámbito territorial con la extensión y los recursos necesarios para asegurar el desarrollo económico y la prosperidad de la nación. Para asegurar esto atacaron a la población judía, los obreros, los gays, los negros, los comunistas, los gitanos, en general todo otro que no se concibiera dentro de la raza aria. Así las cosas, Hitler ordenó la invasión de Polonia. El 1 de septiembre de 1939 se iniciaron las operaciones militares; después, Francia e Inglaterra declararon la guerra a Alemania. Comenzaba así la Segunda Guerra Mundial. Dos años y medio más tarde, el conflicto había alcanzado un efecto mundial. LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL Y EL HOLOCAUSTO Con el Acuerdo de Munich se cedió los distritos Sudetes a Alemania, revirtiendo parte del Tratado de Versalles. Como resultado de la cumbre, Hitler fue nombrado por la revista Time, Hombre del Año para 1938. La segregación de la comunidad judía era inminente; prohibieron su presencia en las escuelas públicas, universidades, teatros, eventos deportivos y zonas “arios”. A los médicos judíos se les prohibió tratar a los pacientes “arios”. En el campo simbólico los judíos debían tener su pasaporte sellado con una “J”. El 9 y 10 de noviembre de 1938, los Nazis destruyeron sinagogas en los barrios judíos de Alemania, Austria y partes de los Sudetes, también atacaron los hogares judíos, las escuelas, negocios y cerca de 100 judíos fueron asesinados en estos días. Este suceso es conocido en la historiografía como Kristallnacht, la “Noche de los cristales rotos”. En adelante, alrededor de 30.000 hombres judíos fueron arrestados y enviados a campos de concentración. En términos generales, entre 1939 y 1945, fueron exterminados al menos seis millones de judíos; dos tercios de la población judía en Europa. Este genocidio es conocido como el Holocausto. Auschwitz-Birkenau, Bergen-Belsen, Dachau y Treblinka fueron los campos de concentración y exterminio más populares del periodo nazi. Los prisioneros eran utilizados como trabajadores forzados para proyectos de construcción de las SS, y en algunos casos se vieron obligados a construir y ampliar los campos de concentración. Fueron torturados y sometidos a experimentos médicos. De este periodo se tiene gran cantidad de documentación, relatos, películas y libros. Hitler ordenó en 1940, la invasión de Noruega, Dinamarca, Francia, Luxemburgo, Holanda y Bélgica. Meses después, Hitler ordenó bombardeos en el Reino Unido, previos al plan de invasión. Se conformó las potencias del Eje, para disuadir a Estados Unidos de apoyar y proteger a los británicos. En el año 1939 se había firmado un pacto de no agresión con Joseph Stalin, pero fue violado por Hitler: envió un ejército masivo de tropas alemanas a la Unión Soviética (Operación Barbaroja). La fuerza invasora se apoderó de un área enorme de Rusia antes de que Hitler se detuviera temporalmente la invasión y desviara las fuerzas para rodear Leningrado y Kiev. El Ejército Rojo adelantó la contraofensiva, y el avance alemán fue detenido fuera de Moscú en diciembre de 1941. Los países aliados en manos del primer ministro Winston Churchill, el presidente Franklin D. Roosevelt y Stalin contuvieron la guerra agresiva y expansiva de las potencias del Eje. A finales de 1942, las fuerzas alemanas fracasaron en la Operación Félix en el canal de Suez, lo que lleva a la pérdida de control alemán sobre el Norte de África. El ejército alemán también sufrió derrotas en la batalla de Stalingrado (1942-1943), considerado como un punto de inflexión en la guerra, y la Batalla de Kursk (1943). El 6 de junio de 1944, fue el Día D, los ejércitos occidentales aliados desembarcaron en el norte de Francia. Muchos oficiales alemanes veían la derrota cerca. El 20 de julio de 1944, se llevó a cabo un intento fallido de asesinar a Adolf Hitler, organizado por el coronel conde Claus von Stauffenberg, este suceso histórico se conoce como la Operación Valquiria. Hitler, arrastró a Alemania a una desesperada resistencia confiando en las potentes armas secretas que desarrollaban los ingenieros del Reich. Pero ya no había nada que hacer, los generales rusos y occidentales se disputaron el honor de llegar los primeros a Berlín, trofeo que se llevaron los soviéticos (2 de mayo de 1945). Dos días antes, el Führer se había suicidado en su búnker. LA SUPERIORIDAD RACIAL Y EL DISCURSO DE ODIO La teoría está claramente expresada en el libro Mi Lucha, escrito por Hitler 9 años antes de llegar al poder, plasma su ideología racista y de superioridad racial, asegurando que el mundo debería estar dominado por los arios. Utilizó varios instrumentos de persuasión para fortalecer su poder y doctrina; empleó banderas, insignias, uniformes e incluso creó su propio periódico. Constituyó las Tropas de Asalto, un grupo violento encargado de proteger al partido, y atacar los grupos contrarios a su ideología como los demócratas liberales, socialistas, comunistas y sindicalistas. En suma, realizaban hostigamientos a los judíos, sobre todo a los comerciantes. Los judíos eran catalogados como una raza “infrahumana”. A raíz de esto se les prohibió la entrada a las universidades, su participación en la esfera pública fue censurada y se les impidió ejercer cualquier puesto de relevancia política o pública. Los discapacitados fueron vistos como una amenaza para la reproducción optima de la raza aria, se desarrollaron varios planes para erradicar a las personas con discapacidad: miles fueron víctimas del Programa de Eutanasia. Varios intelectuales liberales fueron enviados a campos de concentración por ser considerados deformadores de la mente. Muchos lograron huir solicitando el favor al gobierno de Hitler. Ahora bien, los homosexuales eran incluidos en la lista rosa para ser perseguidos y eliminados. Cuando se avecinaba el final de la Segunda Guerra Mundial los guardias de las SS llevaron a los prisioneros de los campos en tren o en marchas forzadas, conocidas como “marchas de la muerte”. Pero, los aliados lograron liberar muchos prisioneros de los campos de concentración. Las marchas terminaron el 7 de mayo de 1945; día en que las fuerzas armadas alemanas se rindieron. Entre 1948 y 1951, casi 700 mil judíos emigraron a Israel, otros judíos refugiados emigraron a Estados Unidos y a otros países, en estos campos permanecieron aproximadamente hasta el año 1957. Consecuencias de la Segunda Guerra Mundial Luego de la Segunda Guerra Mundial el poder quedó en manos de la Norteamérica capitalista y la URSS comunista. Esto indica que, Europa había perdido el poder mundial ostentado desde finales de la Edad Media. Desde la Conferencia de Yalta se asomaron las primeras fricciones, que se reafirmaron en la Conferencia de Potsdam. Estados Unidos e Inglaterra acordaron con Stalin la división de Alemania y validaron la anexión de las repúblicas bálticas y parte de Polonia al territorio ruso. Pero, la situación de la Unión Soviética en este bando fue desfavorable. Así que, se desató la Guerra Fría, entre los Estados Unidos y la URSS, no desembocó en guerra abierta. Ambas potencias se erigieron en líderes de dos bloques ideológicos: el Occidente capitalista y el Este comunista. Por otro lado, Francia quedó realmente devastada, esta situación reactivó los movimientos independentistas en las colonias y provocó el desmantelamiento de los imperios coloniales (descolonización).

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