Historia
Pablo Escobar Gaviria
Biografía de Pablo Escobar Gaviria
Pablo Emilio Escobar Gaviria, más conocido como Pablo Escobar, fue uno de los principales protagonistas en la violencia del narcotráfico en la década de 1980, que además se unió a la violencia de las guerrillas, del ejército y los paramilitares. Fue muy importante por su labor política y el consecuente escándalo al ser el jefe del Cártel de Medellín, uno de los carteles de droga más grandes del mundo. En su afán de poder desató la guerra contra el estado mismo multiplicando la violencia ya mencionada.
Pablo Escobar nació en Ríonegro, Antioquía, el 1 de diciembre 1949 y murió en Medellín en 1993. Su padre fue un administrador de fincas y su madre una maestra de pueblo, por tanta era un pequeño hogar de clase media baja. Desde pequeño trabajó en actividades como lavar coches, criar vacas y ayudar en mercados. Pero al parecer pasó a otras más delictivas como robar coches o matón a sueldo así a corta edad empezó su carrera delictiva desde el contrabando a pequeña escala hasta que se acercó al tráfico de marihuana y después, de cocaína.
La creación del Cartel de Medellín se remonta a 1974 cuando creó un negocio de producción y distribución de cocaína que creció hasta convertirse en una organización dedicada al tráfico de drogas (y la exportación de la misma). En 1976 Escobar fue detenido con diecinueve kilos de cocaína, pero su caso fue sobreseído (cuando se suspende un proceso por falta de causas que justifiquen la acción de la justicia). Mientras el cartel y el tráfico de drogas crecieron, la fortuna de Escobar se hizo considerable.
En vez de seguir con el arquetipo de capo dedicado a actividades ilícitas (que viven en el anonimato e intentan pasar desapercibidos) Escobar se dedicó a construir una imagen de buen hombre, pues financiaba planes de desarrollo para los suburbios de Medellín y así llevo a cabo un barrio llamado Medellín sin Tugurios o barrio de Pablo Escobar, un conjunto de 780 viviendas para la gente necesitada. Con las personas que ganó gracias a sus labores sociales llegó a ser teniente de alcalde del Ayuntamiento de Medellín.
Por esta época del narcotráfico, se torna avaro de poder y en su búsqueda del mismo, comienza a aportar dinero en campañas políticas para que pasaran por alto la actividad misma del narcotráfico y para tener voz en los asuntos importantes de Colombia. En ésta línea Escobar formó un grupo político llamado Civismo en Marcha que se adscribía al Nuevo Liberalismo de Galán y en 1982, Pablo Escobar fue elegido diputado suplente del parlamentario Jairo Ortega en el Congreso de la República. Escobar no fue el único en inmiscuirse en las altas esferas del poder puesto que también estuvo Carlos Lehder Rivas que creó el Movimiento Latino Nacional, aunque era un reconocido narcotraficante.
Pero Escobar se equivocó al relacionar su movimiento con el de Galán, pues cuando este se enteró de sus actividades criminales (denunciadas por El Espectador) lo expulsó de su movimiento. Así acabó la carrera política de Escobar pues, aunque promovió algunas otras compañas y obras sociales junto a los sacerdotes Elías Loperas Cárdenas y Hernán Cuartas, su imagen quedó por el suelo.
Así en 1938 intentó volver a la clandestinidad y durante mucho tiempo esquivó a los periodistas, las autoridades colombianas y las agencias internaciones (Interpol y DEA).
Por lo ya indicado, Luis Carlos Galán se convirtió en el gran enemigo de los narcotraficantes pues era el símbolo contra ellos y contra la corrupción de los políticos. Y por tanto iniciaron una persecución contra él y su movimiento por parte de Escobar y de Gonzalo Rodríguez Gacha. Todo éste escándalo logró que los políticos y las autoridades colombianas se fijaran en el nuevo problema que traía el narcotráfico. En algunas páginas se explica algunas reformas y su relación con el narcotráfico:
“El gobierno de Belisario Betancur (1982-1986) había iniciado en 1983 una reforma tributaria con la cual se quiso ofrecer una legislación que daba la posibilidad de incorporar los llamados dineros “calientes” a la economía del país; se había discutido entonces la posibilidad de legalizar la droga y sus principales protagonistas. Todo ello quedó puesto en entredicho”.
Otro de los factores importantes que sacudió todo éste problema fue la posición de Estados Unidos, ya que siendo el principal consumidor de la droga exportaba quería erradicar todo el sistema (por eso la DEA, administración para el control de drogas, comienza a manejar lo relacionado a la captura de Escobar). Así pues, EE. UU pidió la extradición para los narcotraficantes como medida coercitiva pero los narcotraficantes representados por Escobar dijeron la famosa frase:
“Preferimos una tumba en Colombia a una celda en Estados Unidos”. Pablo Escobar
Aunque al principio no se tomó en cuenta la extradición, después del asesinato de Rodrigo Lara Bonilla, se tornó una realidad pues se le declaró la guerra al narcotráfico y en respuesta se desencadenó una ola de asesinatos a líderes, políticos, periodistas, candidatos presidencias y muchos otros con relevación a nivel nacional (además se les llamó los extraditables).
Mientras tanto, Escobar se convirtió en el jefe del tráfico de droga en Colombia lo que lo convirtió en uno de los hombres más ricos del mundo. Y el país se veía envuelto en una violencia inusitada pues los narcotraficantes llegaron a poner carros bomba, secuestrar, matar y destruir para obligar al gobierno a abolir la extradición. Desde atentados contra la sede del DAS hasta el asesinato de Guillermo Cano, director de El Espactador, y el asesinato de tres candidatos presidenciales: Galán (1989), Carlos Pizarro (líder M-19) y Bernardo Jaramillo Ossa (líder Unión Patriótica).
Finalmente, aunque se entregó a la justicia durante la presidencia de César Gaviria al prohibir la extradición, no paró sus actividades delictivas. Pablo Escobar construyó su propia cárcel donde vivió con todos los lujos que quiso y en donde estaba seguro del estado, de la extradición y de los otros carteles. Cuando se vio en peligro de extradición por su nulo castigo en la cárcel, Escobar aludió a las faltas de garantías del estado y abandonó su cárcel.
Tras mucho tiempo eludiendo su captura, el 2 de diciembre de 1993, con 44 años, Pablo Escobar fue asesinado por quince policías del Bloque de Búsqueda en el tejado de su casa del barrio de América en Medellín mientras intentaba huir. Fue localizado gracias a que llamó a su familia, que se constituía por su esposa María Victoria Henao y sus dos hijos: Juan Pablo y Manuela. Escobar ha sido protagonista de muchas películas, series y libros pues pasó a la historia por toda la violencia, dinero, extravagancias y comportamientos delictivos (prostitución, pedofilia y otros) que representó.