James Joyce (2 de febrero de 1882 – 13 de enero de 1941) escritor. Nació en Rathgar, Irlanda. Su familia tenía una fuerte tradición católica, por ello, su educación se desarrolló en escuelas católicas, primero ingresó a un colegio dirigido por jesuitas de Belvedere, luego estuvo en otros de la misma linea. Desde muy niño Joyce mostró su habilidad para la escritura, ejemplo de esto fue el poema que escribió en 1891, cuando tenía nueve años, James escribió el poema titulado Et tu, Healy, narra la muerte del político irlandés Charles Stewart Parnell. Al leerlo su padre quedó tan impresionado que pago por su impresión, y luego envió una copia a la Biblioteca Vaticana.
Su familia tenía varios problemas económicos debido a la adicción al alcohol de su padre, John. Al graduarse de la educación básica ingresó en la National University de Dublín, en la que estudió diversas lenguas y se apasionó por la gramática comparada. Gracias a su formación en escuelas religiosas, desarrolló un espíritu disciplinado y metódico que se reflejó fielmente en sus composiciones literarias más innovadoras y experimentales.
Desde muy joven manifestó inconformidad por la búsqueda nacionalista de los orígenes de la identidad irlandesa, y su intención de preservar su propia experiencia lingüística, esto le condujo a reivindicar su lengua materna, el inglés, en detrimento de una lengua gaélica que no estimaba. Decidió radicarse en la capital francesa para estudiar medicina pero fue imposible debido a los pocos recursos que su madre poseía, así que decidió estudiar literatura. Pero, no duró mucho tiempo allí y decidió retornar a Irlanda, donde se dedicó a la enseñanza.
Meses después tuvo que acudir a su hogar para cuidar las últimas horas de vida de su madre, enferma terminal de cáncer. La muerte de su madre lo sumió en un desasosiego que lo llevó a los peores lugares de Dublín, por un largo periodo fue visto vagabundeando. Fueron días difíciles en los realizó oficios varios y sobrevivió en parte gracias a los préstamos de los amigos, e incluso cantando, puesto que era un consumado tenor, llegando a lograr un premio en el festival irlandés de Feis Ceoil en 1904.
Luego de casarse, se trasladó a Zurich para formar un hogar, luego de un tiempo tuvo que trasladarse junto a su esposa a Trieste, para asumir el puesto de profesor de inglés en una importante academia de idiomas. Durante este periodo alternó su trabajo con la escritura, logró publicar su primer volumen de poemas Música de cámara, apareció en 1907; en 1912 publicó en su país natal una serie de quince relatos cortos dedicados a la población de Dublín, Dublineses, que fue publicado en 1914.
Los embates de la Primera Guerra Mundial le impidieron trabajar lo que hizo que él y su familia vivieran pobremente. Durante este periodo de caos civil lo único que pudo hacer fue escribir su novela semiautobiográfica Retrato del artista adolescente, de sentido profundamente irónico, que se publicó en la revista The Egoist y apareció dos años después en forma de libro en Nueva York, aumentando su popularidad.
Aunque en ese momento era un escritor poco reconocido. Realmente, su consagración literaria llegó con la publicación de su obra maestra, Ulises (1922), novela experimental en la que consiguió que cada uno de sus episodios tuviera su propia técnica literaria: así, se puede observar capítulos escritos al modo periodístico o incluso imitando los catecismos. Ulises al igual que otras obras suyas tuvo grandes problemas para encontrar editor en Gran Bretaña, llegando a estar prohibido a partir de 1920. Finalmente, la primera edición completa del libro se pudo concretar en París en 1922.
Posteriormente, decidió pasar un buen tiempo en Inglaterra, durante este periodo trabajó en su obra Finnegan’s wake. En ella, se presenta un estilo extremo y, con ello, al absurdo, pues el lenguaje deriva experimentalmente, desde el inglés, hacia un idioma propio del texto. Para su composición, el autor mezcló elementos de alrededor de sesenta idiomas diferentes, vocablos insólitos y formas sintácticas originales. En este texto onírico el autor irlandés llevó al límite su pasión por los acertijos, los juegos de palabras y la experimentación literaria, aunque lastimosamente recibió una muy mala acogida por parte de la crítica.
Su técnica literaria recibió el nombre de «flujo de conciencia», también se caracterizó por su exquisita técnica que desintegra el lenguaje convencional y lo funde con otro, completamente personal y simbólico. Otra de sus grandes obras de Joyce, está consagrada a Irlanda, aunque vivió poco tiempo allí, y mantuvo siempre una relación conflictiva con su compleja realidad política e histórica. Su trabajo lo presentó como uno de los novelistas más influyentes y renovadores del siglo XX.
La figura de Joyce es reconocida y admirada en diversos países de Europa, concretamente en Francia, también en Estados Unidos. Actualmente su obra es estudiada y aclamada por la crítica actual y en Irlanda, debido a sus diversos comentarios en contra de su país y de su cultura ni siquiera se permitió la repatriación de su cadáver. Actualmente se celebra el Bloomsday en homenaje al protagonista de Ulises y a su autor, uno de los irlandeses más destacados y reconocidos de la historia. La vida de Joyce terminó debido a una ulcera que tenía muy avanzada el 13 de enero de 1941 a los 58 años de edad.