Filósofos
Enrique Molina Garmendia
Biografía de Enrique Molina Garmendia
Enrique Molina Garmendia (4 de agosto de 1871 – 6 de marzo de 1964) filósofo y pedagogo. Nació en La Serena, Chile. Sus padres fueron Telesforo Molina y Mercedes Garmendia. Tuvo interés por las ciencias humanas. Posteriormente, estudió en la Escuela Pública de La Serena. Viajó a la capital de Chile para estudiar leyes, aunque su intención era estudiar Medicina. Sin embargo, los altos gastos que demandaba no se lo permitían.
Luego estudió en el Instituto Pedagógico para ser profesor de historia, geografía y filosofía, al culminar ejerció su carrera docente. En primera instancia trabajó en el Liceo de Chillán, allí conoció al reconocido Alejandro Venegas Carús. Poco a poco, se fue alejando de la idea de ejercer la abogacía. Fue participe del Congreso General de Educación (1902), asimismo dio su opinión sobre si debía imprimirse un carácter humanista o técnico a la enseñanza del Liceo, fuerte debate del momento. Molina entendía que lo conveniente era no magnificar el concepto utilitarista de la educación y de fomentar la cultura intelectual.
Asumió el cargo del Liceo de Talca, fue el pionero de un proceso de modernización de la educación y su currículo. Su trabajo fue arduo durante varios años, realizó varios viajes de índole político-cultural a países como Alemania y Francia. Al año siguiente, en el Congreso de Educación Secundaria, rechazó las acusaciones sobre la responsabilidad del liceo en la decadencia económica del país y defendió las enseñanzas humanísticas y las ciencias. Muchas de las ideas pedagógicas de Molina fueron insumo para textos como:
La misión del profesor y la enseñanza
La filosofía social de Lester Ward
La ciencia y el tradicionalismo
La cultura y la educación general
La colección de ensayos Filosofía americana y Educación contemporánea
Entre 1919-1956 asumió las riendas de la Universidad de Concepción y fue ministro de Educación Pública en este lapso. Realizó varias conferencias, foros y escribió varias publicaciones; Las democracias americanas y sus deberes (1917), por ejemplo. Gracias a su recorrido intelectual y a la ayuda de ilustres patrocinadores logró fundar la Universidad de Concepción.
Luego de un viaje al país norteamericano publicó De California a Harvard, se enfocó en las universidades norteamericanas y trató algunos problemas de la educación local. Su reflexión sobre el modelo estadounidense fue muy importante y recibió importantes comentarios. Molina fue nombrado rector de la Universidad de Chile, realizó varias reformas en los programas de enseñanza.
También estuvo a cargo del Ministerio de Educación Pública; sin embargo, se retiró rápidamente de este por la falta de recursos.
Otras obras
Por las dos Américas (1920)
La revolución rusa y bolchevista (1935)
Páginas de un diario (1940)
Notas y reflexiones (1941).
Como parte de su homenaje, en 1959 se realizó un monumento esculpido realizado por el artista Samuel Román y recibió el título de profesor honoris causa de la Universidad de Santiago.