Historia
Bárbara de Braganza
Biografía de Bárbara de Braganza
Bárbara de Braganza (4 de diciembre de 1711 – 27 de agosto de 1758) Reina de España. Nació en Lisboa, España. Sus padres fueron Juan V y María Ana, reyes de Portugal. Desde pequeña recibió una relevante formación cultural en la corte portuguesa. Como resultado de un acuerdo entre España y Portugal destinado a fortalecer las relaciones entre la corona española y portuguesa, tuvo que unirse en matrimonio con el príncipe Fernando, quien sería llamado Fernando VI cuando asumió el reinado.
De esta unión se realizaron varios retratos, y usualmente en ellos sus expresiones eran parcas y serias. Además, todo indica que, Bárbara de Braganza era poco agraciada. Una cruel sátira la denominaba de “fea, gorda y con viruela”. Sin embargo, era una joven bondadosa, piadosa, inteligente, y muy culta. Aprendió varios idiomas y disfrutaba de la lectura y de la música, siendo una excelente intérprete de clavicémbalo y una compositora discretamente hábil. Su maestro fue Domenico Scarlatti. Se convirtió en una exponente del mundo artístico y cultural.
Ahora bien, en cuanto a Fernando VI sobresalía en galanura. Era el último hijo de Felipe V y de su primera esposa María Luisa Gabriela de Saboya, ella murió cuando él tenía cinco meses y creció retraído y solitario. Era exageradamente tímido, y la melancolía le llevaría hasta la locura. Durante su reinado se mostró como un ser responsable, recto, lleno de buenas intenciones y preocupado por el bienestar de sus súbditos. Nada belicoso ni militarista, por eso mantuvo a su reino lejos de guerras y conflictos.
La pareja sufrió una gran exclusión a nivel político por parte de Isabel de Farnesio durante el reinado de Felipe V, a pesar de ser los herederos. Bárbara de Braganza se ganó el amor y la confianza de su marido, y él le correspondió con gran afecto y fidelidad.
Con la nueva pareja real se inicia “el reinado de los melómanos”. Siguiendo la tradición de patronazgo regio de la propia monarquía española, la corte de Fernando VI y Bárbara de Braganza se preocupó por el desarrollo cultural. Las preferencias musicales de la reina estaban centradas en la música del maestro Scarlatti, que componía una serie de bellísimas sonatas, y también hacia el cantante de ópera Farinelli, fue recompensado por los reyes con el hábito de la Orden de Calatrava.
La ópera ocupó un importante lugar en la corte. Igualmente, la música religiosa alcanzó una elevada consideración. Bárbara de Braganza, se preocupó por la capilla real y por el coro de niños cantores, componiendo ella misma una Salve. La muerte de la reina se dio el 27 de agosto de 1758. Claramente Fernando VI se vio muy afectado: dejó de lado sus obligaciones de gobierno y se retiró al castillo de Villaviciosa de Odón, donde a causa de la depresión murió un año más tarde.