Arte

Claude Debussy

Tomado de: Atelier Nadar [Public domain], via Wikimedia Commons

Biografía de Claude Debussy

Claude Debussy (22 de agosto de 1862 – 25 de marzo de 1918) compositor e importante exponente de la música impresionista. Sus aportes en el campo de la armonía fueron esenciales para las tendencias musicales que surgieron en el siglo XX. Su padre, Manuel-Achille Debussy, era propietario de una tienda de porcelana y también trabajó en la imprenta de Paul Dupont. Su madre se llamó Victorine Manoury.

Sus padres le inculcaron el gusto por el teatro lírico y las óperas. Gracias a su tía Clementina Debussy, recibió sus primeras lecciones de piano. Además, empezó a aprender a tocar violín con la ayuda de Jean Cerutti, quien le instruyó en los rudimentos de la técnica pianística. Ahora bien, durante un año se preparó para realizar los exámenes de ingreso al conservatorio de París, aprobando con solvencia. Allí tuvo por maestros a Lavignac, a Marmontel y a Ernest Guiraud.

Para el año de 1880, fue pianista de cámara y profesor de piano personalizado de los hijos de Nadesda von Meck. Mantuvo este cargo durante cuatro años. Luego, viajó a Moscú. El hijo pródigo, fue la cantata merecedora del Prix de Rome. El joven Debussy, no sentía inclinación alguna por el clasicismo romano. Por el contrario, sentía gran atracción por la vida cultural de París. Como parte de sus experiencias musicales (conoció el canto gregoriano, las melodías africanas y javanesas, presentadas en la Exposición Universal de París).

Gracias a las composiciones líricas para canto y piano se percibe la evolución del artista, entonces se inclinó por un formalismo melódico, estilo aburguesado, prosas evocadoras tales como: Arietas olvidadas (1888), Cinco poemas de Baudelaire (1890), Fêtes galantes (1904), Prosas líricas (1893) y Tres canciones de Bilitis (1898).

En una segunda etapa, gracias a la creación de un impresionismo musical forjó la disolución de las formas clásicas realizada por el romanticismo. Publicó dos obras infantiles: El rincón de los niños (1908), y Preludios (1910 y 1913), demostró el equilibrio de la composición moderna para piano. Lo anterior demuestra que Debussy es el iniciador de las tendencias musicales de la actualidad. En suma, es necesario reconocer sus fallas relacionadas con el impresionismo orquestal, a pesar del interés en los poemas sinfónicos: El mar (1905) ni Imágenes (1909), Nocturnos (1899).

Hacia 1910 tiene nueva orientación clasicista que reacciona contra la difusión del impresionismo, manifestada en la restauración de la precisión fónica e incluso formal. Ahora bien, la Primera Guerra Mundial acabaría de fortalecer sus tradiciones de la civilización nacional.

En la última fase del arte de Debussy publicó: El martirio de San Sebastián (1911), donde la elevación de los valores musicales es menoscabada por el carácter híbrido del espectáculo escénico, ni ópera ni ballet.

En 1893 fue a Gante para crear la música del drama de Maeterlinck. En 1909 estuvo en Londres con motivo de la presentación de Pelléas. Luego, visitó Viena y Budapest, Turín, Rusia, Holanda y Roma, adelantó varias composiciones. De manera sorprendente durante su vida careció de discípulos. Actuó frecuentemente como colaborador musical en revistas literarias. Fue operado a causa de un cáncer intestinal. Cayó muy grave en 1918, su salud emocional estaba muy mal por los desastres de la Primera Guerra Mundial y su cuerpo no soportó más, así que murió el 25 de marzo de 1918.